En un encuentro apasionante, y también cambiante de momentos, San Isidro se quedó con un partidazo ante Platense de local en el Severo Robledo de San Francisco y se adelantó en las Finales de La Liga Argentina. Los Halcones Rojos, con un fantástico despliegue defensivo y una gran intensidad, se impusieron por 79-66 y dejaron la serie 2 a 1, quedando a un paso del título y del ascenso. El domingo, nuevamente en tierras cordobesas, se disputará el cuarto encuentro de la serie.
Juan Rodríguez Suppi fue la máxima figura de la noche con un doble doble de 17 puntos (4/7 en triples) y 10 asistencias para San Isidro, escoltado por otros dos grandes protagonistas como Rodrigo Sánchez (14 puntos y 11 rebotes) y James Cambronne (16 unidades). Por su parte, Cedric Blossom fue lo mejor en Platense con 18 tantos.
El tercer juego arrancó quemando motores, sobre todo desde el costado local, donde San Isidro empezó totalmente encendido. Con Cambronne haciéndose pesar en el pick para dañar de frente al aro, el extranjero anotó 9 de los primeros 16 puntos de los cordobeses para imponer un contundente 16-2 en cuatro minutos. A Platense le costó muchísimo, Bruna no pudo hacerse sentir porque San Isidro le hizo un excelente cerco y los de Torre se mostraron intensos.
San Isidro tuvo control absoluto en los primeros ocho minutos. Más allá de Cambronne, la versatilidad de Rodrigo Sánchez y el tiro exterior de Haag también fueron factores determinantes para que el dueño de casa consiga un poderoso 21-4 en menos de seis minutos. Bruna rompió la sequía del Calamar con un triple, comenzando una interesante seguidillla de puntos por parte de la visita. Así fue como los calamares pasaron de estar -17 a colocarse -10 sobre el final del cuarto: 31-21.
En ese pasaje, más allá del destape de Platense, también hay que destacar el trabajo de Blossom. Sani por su parte se mantuvo en pie y no dejó que la diferencia sea más estrecha gracias a la mano de Rodríguez Suppi, que a su siempre electrizante juego le agregó una buena rachita de conversiones.
El trámite fue totalmente distinto en el segundo parcial. Sani terminó secándose ante un Platense que pasó a ser mucho más dominante, en una continuidad del crecimiento que ya venía simulando en el ocaso del primer episodio. La media cancha de Bruna y Pais equilibró la historia, el primero con toda su jerarquía a la hora de manejar los hilos del equipo y el segundo con su cuota anotadora a raíz de dos triplazos consecutivos. Platense se puso abajo por apenas una posesión (33-31) en un abrir y cerrar de ojos, y el juego pasó a tener otro color.
Sani movió el banco y tuvo algo de aire (entraron Santiago González, Ludueña y Feder Ponce), tomando una renta de 36-31. Pero la diferencia no fue lo suficientemente amplia y aunque estaba en desventaja el control pareció tenerlo Platense en todo momento, porque impuso su trabajo defensivo y llevó el partido para el terreno que más cómodo le queda. No obstante, hubo casi 5 minutos en los que ninguno pudo marcar puntos, el juego se pinchó un poco y sobre el final los de Vázquez se arrimaron con Bruna desde la línea: 3 libres del base tras una falta de Feder Ponce al tiro, y Platense se acercó a un interesante 38-36 que abrió el panorama de cara al segundo tiempo.
Transitoriamente Essengue igualó en 38 al comenzar el tercer periodo. Sin embargo, San Isidro salió del descanso largo con los aires renovados y una intensidad impactante. A ese ritmo también le sumó una gran defensa y mucho acierto adelante, ya que los sanfrancisqueños pegaron rápido con tres triples (dos de Suppi y uno de Corzo) para tomar un despegue de once: 49-38 llegando a la mitad del parcial.
Los Halcones Rojos le cerraron los caminos a Platense y lograron estirar diferencias una vez más. Tanto Suppi como Cambronne venían redondeando ya una noche brillante, pero a ellos se sumó un excelente pasaje de Ludueña, electrizante para castigar en el momento justo y que Sani termine despegándose por 15 (60-45). Eclipsando al Calamar y creciendo en confianza, los cordobeses cerraron un tercer cuarto brillante.
No hubo reacción alguna para Platense, que siguió sintiendo la intensidad defensiva de San Isidro. Los triples de Ludueña y Suppi continuaron lastimando a la visita, más el trabajo incansable de Sánchez, el peligro que siempre representó Corzo desde el perímetro y, ya sin Cambronne por descanso, González haciendo un gran trabajo debajo del aro.
A pesar de que Platense logró recortar la brecha de a poco, la realidad es que el partido se fue apagando en ritmo con el correr de los minuto y la victoria de San Isidro fue encaminándose. El margen no fue abultado en demasía, pero los Halcones tuvieron todo bajo control y a Platense le costó. La distancia, que en un momento del último cuarto fue de 19 (68-49), se recortó a 10 restando menos de dos minutos con un par de llegadas del Calamar (70-60). Sin embargo el quiebre definitivo llegó a 1:40 del final con triple de Corzo que terminó sentenciando la historia.
Fue 79-66 final, resultado que dejó a San Isidro a una victoria más de coronar su campaña y lograr el deseado título de la categoría junto con el ascenso a la Liga Nacional. En tanto que Platense ahora está obligado a reaccionar y ganar el encuentro del próximo domingo (22 horas por DEPORTV) para forzar un quinto juego, que de ser necesario se jugará en Vicente López.
Fuente: Prensa AdC
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