Con un alto despliegue defensivo y demostrando una convincente recuperación, Platense se quedó con el segundo punto de las Finales de la Liga Argentina después de derrotar a San Isidro por 76-58 de local en Vicente López. De esta forma, la serie por el campeonato y el ascenso quedó igualada en 1, y ahora con esta paridad la historia se mudará a San Francisco para la continuidad de la serie, teniendo en cuenta que el Juego 3 se disputará el próximo viernes 21 en el Severo Robledo.
Platense tuvo varios puntos altos en la noche del domingo, aunque Cedric Blossom sin dudas fue el máximo destacado con 19 puntos, 5 rebotes y 6 asistencias. Detrás del extranjero, labores como las de Felipe Pais (16 puntos), Pablo Bruna (12 tantos, 6 rebotes y 8 asistencias) y Gastón Essengue (13 puntos, 8 rebotes y 4 asistencias) también se destacaron. En San Isidro, lo mejor pasó por James Cambronne con 15 tantos.
El encuentro se demoró en arrancar algunos debido a un problema con uno de los aros mientras los equipos entraban en calor. Solucionado esto, la acción del segundo partido empezó a escribirse.
Más allá de que San Isidro le dio inicio a la noche con dos buenos triples de Rodríguez Suppi y Haag, no surtió impacto dentro de un Platense que se acomodó rápido para tomar ventajas tempraneras dentro de la noche. El local pasó de estar abajo por dos unidades (8-6) a ganarlo por cinco (15-10) en un par de acciones. La defensa, presionando al receptor de la salida y corriendo la cancha tras ese marcaje intenso, valió para plasmar diferencias.
Torre pidió minuto para reorganizar a Sani, pero más allá de que los Halcones lograron igualar parcialmente (15-15), el Calamar lo terminó cerrando mejor tras un triple de Lorio y Bruna (clave junto con Blossom en este inicio) desde la línea. Fue 21-15 para el equipo del Cholo Vázquez, un comienzo que, más allá de que en su desarrollo fue distinto, resultó bastante similar al del primer juego hasta ese momento.
La intensidad de Platense siguió haciéndose sentir en el segundo capítulo, todavía sin imponer una brecha grande en el tanteador pero sí marcando un camino a través de la defensa. Los de Saavedra acosaron cada posesión de San Isidro, llegaron a sacar ocho de ventaja (27-19) pero entonces llegó una reacción cordobesa, inspirada en Cambronne (con un triple y haciéndose fuerte dentro de la zona pintada) para recortar la historia: 27-25 a cinco minutos de terminar el parcial.
Más allá de que Sani amagó esa reacción, Platense volvió a dominar y fue encontrando acciones claves (doble y falta de Lugrin, triple de Pais y un Essengue más encendido) para escaparse a diez de distancia (39-29), siempre apoyado en su defensa y su agresividad en ambos costados. Y así, más allá de una bomba de Haag para intentar acercar a San Isidro, el Calamar volvió a ayudarse en otro triplazo de Pais para sostener un interesante 42-32 al descanso largo.
San Isidro fue a la carga durante el tercer cuarto. Más conectado en el aspecto defensivo y dejando con muy poco gol a Platense, el elenco de Torre reaccionó y se fue poniendo a tiro. No era una gran distancia, ya que en ese pasaje llegó a ser de 12 la máxima (44-32), pero los sanfrancisqueños fueron mucho más punzantes en el reinicio de las acciones y bajaron la brecha. Al trabajo de Cambronne se sumaron las confiables cuotas anotadoras de Sánchez y Corzo, achicando a 49-44 a raíz de esa defensa intensa.
Corzo mismo volvió a ser determinante dentro de un pasaje de 8 a 2 para Sani, donde el alero santiagueño se encargó de despacharse con todos los puntos en cuestión. Y más allá de que la visita se puso abajo por uno (51-50), Platense lo cerró mejor en el último minuto y con el juego interior de Blossom más un triplazo de Pappalardi el marcador se fijó en 57-52 a favor de los calamares. Todo por definirse en el cierre.
Pero la reacción de San Isidro no fue más allá. Platense abrió el último cuarto dispuesto a evitar que la historia del primer juego se repita y golpeó desde el arranque. Esta vez fue letal, nunca se desordenó ni perdió la compostura, ya de hecho defensivamente dejó seco a su rival en más de 4 minutos, y en el medio se escapó a once puntos (63-52).
Con aires de sentencia, Sani ya no pudo despertarse y Platense apagó todos los intentos posibles. Blossom, Bruna, Pais, Essengue y más, el Calamar se levantó con una enorme confianza y firmó un marcador final de 76-58, apoyado en ese último cuarto de 19 a 6 donde desplegó un básquet defensivo brillante y demostró estar vivo en estas Finales.
Fuente: Prensa AdC
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