Quilmes estaba delicado luego del 0-2 con el que arrancó 2016. Se sobrepuso a la urgencia y también al bache de juego que sufrió durante el partido. Con personalidad, algunos pasajes de lucidez, eficaz defensa y buenas actuaciones individuales de Walter Baxley y Enzo Ruiz. Así superó a Instituto por 76-67 por la Liga Nacional de Básquetbol y recortó un poco la ventaja que le llevan sus rivales directos por la permanencia.
El equipo marplatense le sacó el jugo al rato de lucidez ofensiva que tuvo en el primer tiempo. No fue muy prolongado. Tan sólo unos minutos del primer cuarto en los que repartió bien el juego. En los que encontró con alguna frecuencia a Gallizzi en posición de lastimar en la pintura y también espacios para algún tiro abierto dañino de Baxley o Ruiz. En los que se ilusionó con la claridad que insinuó Vildoza, de fugaces ingresos al partido.
Bastó para tomar una ventaja del orden de los ocho puntos. Y luego pudo sostenerla con su aplicación para defender, a falta de otros argumentos.
Instituto, de alguna manera, le facilitó la tarea. Con su casi nulo poder de fuego exterior (apenas 1/7 triples en toda la primera mitad), con el patético partido de Giddens (0/5 en cancha y tres pérdidas en la mitad inicial) y con sus problemas de traslado: diez balones entregados a la hora de llegar al descanso largo. Tan sólo opuso el oficio de Cowan para conseguirse tiros cerca del canasto.
Sin embargo, el rendimiento defensivo de los cordobeses no dio margen a lucimiento alguno por el lado local en el resto de la primera parte. Y el 34-28 final sugirió que Quilmes debería esforzarse bastante aún en el complemento.
Eso pareció de movida. Los cordobeses, con el juego de parejas de Cowan y Rollins, arrimaron hasta situarse a un doble (39-37) a falta de siete minutos. Pero hasta ahí llegaron.
Quilmes creció mucho defensivamente y en cuatro minutos estampó un parcial de 11 a 2 que le devolvió el alma al cuerpo. ¿Las razones? La decisión con la que Baxley se hizo cargo del mal momento y el buen partido integral de Enzo Ruiz, celoso custodio de Giddens y claro para habilitar a sus compañeros.
Esa capacidad de reacción en el peor momento salvó a Quilmes, que recuperó una luz que osciló en los diez puntos y la manejó bien. A Instituto, con 4/17 en triples y el borrón de Giddens, su capacidad de lucha no le alcanzó. El equipo de Ramella, entonces, alcanzó un triunfo indispensable.
Síntesis:
Quilmes (76): B. Sansimoni 2, W. Baxley 21, E. Ruiz 11, M. Maciel 10 (x) y T. Gallizzi 12 (FI); F. Calvi 6, L. Vildoza 6, D. Romero 8, A. Spalla 0, J. Merchant 0 y A. Lencina 0. DT: Leandro Ramella.
Instituto (67): P. Bruna 7, M. Byró 4, J. Giddens 2, J. Cowan 24 y H. Rollins 18 (FI); N. Zurschmitten 5, F. Mansilla 7, L. González 0 y E. Martina 0. DT: Maximiliano Seigorman.
Estadio: Once Unidos.
Arbitros: Roberto Smith-Silvio Guzmán.
Progresión: 20-13, 34-28 y 58-45.
Fuente: La Capital
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