Con un trabajo defensivo muy intenso y la colaboración de varios de sus jugadores al momento de lastimar en ataque los celestes dieron un gran paso en su debut al vencer a Brasil por 71 a 57.
El carácter defensivo se apoderó de los primeros minutos de juego entre Brasil y Uruguay que en campo atrás realizaron gran parte del trabajo. El plan de juego para los dirigidos por Rubén Magnano contó con cierta tendencia hacia el juego interior con un Joao Paolo Batista muy activo. Los celestes por su parte buscaron en la rotación de balón los espacios para el protagonismo perimetral. En este aspecto, Mathías Calfani y Mauricio Aguiar fueron importantes. Los primeros 10’ culminaron con igualdad en 12.
Con rotación de bola y buen trabajo de cortinas los dirigidos por Adrián Capelli encontraron una corta renta al promediar el segundo cuarto. La fortaleza al momento de cargar el rebote ofensivo (11) dio segundas opciones y Bruno Fitipaldo se nutrió de las descargas para lastimar de tres. De todas formas, Marquinhos (9) lideró a su selección con acciones de cuarta distancia. La fricción del juego se notó en las pelotas perdidas para ambas selecciones (Brasil 12 y Uruguay 9). Los celestes cerraron la primera parte arriba por 27 a 24.
Para el complemento los brasileños lograron un rápido parcial que los puso adelante en un trámite que se tornó de alternativas cambiantes. La selección charrúa atacó el aro con agresividad y buscó la culminación de sus ofensivas más cerca del aro. A su vez, Marquinhos fue imparable con amplio repertorio atacante y Rafael Mineiro creció en ambas pinturas. La tormenta norteña la frenó Luciano Parodi quien con puntos consecutivos y una asistencia fenomenal para Borsellino (notable cuarto) dejó a su selección 46 a 41 adelante.
El periodo final inició de la mejor forma para Uruguay con un parcial de 5-0 para encontrar una máxima de 10 (51-41). Fitipaldo lastimó desde lejos, Martín Osimani aprovechó el aire de descanso para ofender y Borsellino capitalizó su ventaja física a 8’ del cierre. Lo cierto es que Brasil no encontró solidez defensiva, apuró procedimientos y permitió el ataque rápido rival. De esa manera, las ventajas fueron en aumento y treparon a 13 (60-47) con 5’ para jugar. De ahí en adelante la selección sureña dominó el marcador con un equipo que funcionó prácticamente sin fisuras en el cuarto final.
En materia goleo Bruno Fitipaldo terminó con 12 unidades para el vencedor, al tiempo que Maquinhos cerró con 21 para el perdedor. Uruguay enfrentará este martes a Panamá (12 hs) mientras que Brasil lo hará sobre República Dominicana (18 hs).
BOXSCORE
Fuente: Fiba Americas
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