El conflicto entre la Asociación de Clubes y los jugadores no está cerca de una solución. Al contrario. Las dos partes están firmes en sus posturas y el diálogo parece haberse agotado. ¿Dónde están los principales puntos de cuestionamiento?
Según publica el Diario Olé, la Asociación de Jugadores le apunta a dos temas fundamentales que se habían solicitado en el petitorio enviado inicialmente a la AdC. Por un lado, las fichas del TNA, que bajaron de ocho a seis y no hay lugar para la modificación. "Son reglamentaciones que impactan directamente sobre el físico de los jugadores", señaló Mike Stura, presidente de la AdJ. También se había pedido un kinesiólogo que acompañe a cada equipo, pero la segunda categoría no lo tendrá.
El otro foco es el del contrato único que quiere establecer la AdC, que la AdJ pidió que fuera consensuado pero que lejos está de serlo. Los jugadores reclaman por una serie de cláusulas impuestas por la AdC que hacen que aceptarlo sea inviable. ¿Cuáles?
-El club pondrá un médico facultativo a disposición y en la medida que lo procure. Esto puede generar, por caso, que el equipo ponga un responsable que no esté acorde a lo que necesita el jugador, que debería recurrir a contratar por su cuenta un especialista ante una lesión. Y si el problema complica a futuro, el club no estaría dispuesto a seguir pagando un sueldo.
-La reforma en la libertad de acción. Así, los clubes se quedarían con el derecho y destino de los menores de 26 años para luego definir sobre su futuro.
-Se impone un punto con muchísimas trabas y burocracia para cuando un jugador quiere actuar ante un incumplimiento de pago.
-Otro le da beneficios a los clubes que no cumplen en caso de atraso en el pago.
-Se impone una cláusula en la que los jugadores tienen que pedir autorización al club para poder jugar el Juego de las Estrellas, su fiesta anual. En 27 años de historia, los jugadores siempre de manejaron con libertad en el evento, siempre con el seguro ante cualquier eventualidad.
Los jugadores se reunirán el próximo martes para responder a lo que propuso la AdC, pero la unidad entre ellos es total y, en estas condiciones, no aceptarían. ¿Cómo podría seguir? "Se puede buscar un juez, alguien que medie en estas situaciones. O se pueden discutir estas reformas en un juez de trabajo, ante un amparo de acción colectiva. O ir al Ministerio de Trabajo", explicó Carlos Montesano, abogado de la AdJ.
La relación entre las partes parece quebrada. El conflicto sigue, la veda de los jugadores para firmas y negociaciones se mantiene y no asoma una solución en el horizonte.
Fuente: Diari Ole
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