El equipo "tricolor" estuvo seriamente comprometido por la zona de Atenas. Pero redobló la apuesta defensiva en el cuarto final y así revirtió la historia. Baxley fue el goleador, pero el hombre del vuelco fue Luca Vildoza.
Con la curiosidad de la simpática presencia en la platea de Justin Giddens, el extranjero de Peñarol, para ver a su amigo Baxley, Quilmes encontró anoche un triunfo de oro sobre Atenas de Córdoba por 79 a 75 con una notoria mejoría en el cuarto final. Ramella, en el momento de las definiciones, se la jugó por Vildoza en cancha en lugar de Baxley y apuntaló una defensa hasta entonces endeble. Así mantuvo el invicto en casa por una nueva jornada de la Liga Nacional de Básquetbol. Previamente, por la Liga de Desarrollo, los chicos quilmeños volvieron al triunfo y se impusieron a los cordobeses por 91 a 85 con una gran producción de Bruno Sansimoni, autor de 39 puntos.
Atenas le puso a Quilmes las cosas muy cuesta arriba con una defensa zonal que le costó mucho resolver. Cequeira pocas veces pudo romper y generar buenas opciones de tiro. Habilitaciones a los internos casi no hubo. Y la apuesta del tiro abierto fracasó estruendosamente a lo largo de toda la primera etapa (1/13 triples).
El equipo de Ramella fue más dependiente de Baxley que nunca. El estadounidense respondió en gran forma a las urgencias. Atacó el aro cordobés con decisión y sostuvo la raquítica ofensiva quilmeña.
Lo suyo alcanzó en el primer cuarto para ir al descanso corto con un nivelado 16-16. A Atenas, que jugó mejor, que impuso el notable juego de pies de Míkulas en la pintura para burlar repetidamente a Clark, las pérdidas de balón (9 en el primer cuarto)le pasaron una elevada factura.
Pero en el segundo cuarto el equipo cordobés controló mejor el balón. Y siguió lastimando repetidamente interior. No tanto con Míkulas, pero sí con Matías Bortolín, quien cargó el rebote ofensivo con eficacia y consiguió valiosas segundas instancias.
Quilmes continuó encomendándose a Baxley, quien cerró el primer tiempo con 18 puntos. Pero lo falló todo de afuera y no encontró una segunda vía de gol que inquietara a un rival que estaba muy cómodo con su defensa zonal. Los cordobeses se fueron al descanso 38-31 arriba y controlando la situación.
Quilmes encontró la medida del lanzamiento exterior en el tercer cuarto con un poco más de claridad para mover el balón contra la zona. Pero su mejoría ofensiva se dio de narices con otros problemas. Logró contener un poco mejor a los internos cordobeses, pero sufrió un cuarto endemoniado de Bruno Lábaque, autor de diez puntos en el parcial.
Cuando parecía que, de todos modos, iba a poner en verdaderos aprietos a los visitantes, flaqueó en el control de su propio rebote. Atenas le tomó seis rebotes de ataque en los últimos dos minutos del cuarto y así encontró la llave para llegar 59 a 53 al frente al cuarto final.
Ramella intentó en el cuarto final una jugada arriesgada. Dejar en el banco a Baxley y apostar a la mejoría defensiva con Luca Vildoza. Le salió redondo. Las piernas y el poder de salto del pibe le cambiaron la cara atrás a Quilmes. Y entre Romero y Clark clausuraron las vías interiores que tanto s dividendos le habían dado a los cordobeses.
Con un doble de Cequeira, quien anotó todos sus puntos en el cuarto final, Quilmes pasó por primera vez al frente (71-69) a tres minutos del final. Y vio la luz a 22 segundos del cierre gracias a un doble largo de Baxley, reaparecido en escena a partir de la quinta falta de Ivory Clark, que llevó el tanteador a 77 a 74
Una técnica cuestionable de Fernández a Cequeira puso suspenso porque González anotó el tiro libre. Pero, tras la reposición, Baxley cortó un temerario pase de Elsener y aseguró la victoria.
Síntesis:
Quilmes (79): Luis Cequeira 7, Walter Baxley 31, Maximiliano Maciel 6, Ivory Clark 4 (X) y Tayavek Gallizzi 8 (FI); Luca Vildoza 15, Diego Romero 8, Lucas Ortiz 0 y Bruno Sansimoni 0. DT: Leandro Ramella.
Atenas (75): Bruno Lábaque 12, Luciano González 11, Alexis Elsener 5, Gabriel Mikulas 14 y Juan Manuel Torres 14 (FI); Matías Bortolín 14 (x), Juan Manuel Rivero 3, Demian Filloy 2, Álvaro Merlo 0 y Agustín Más Delfino 0. DT: Gustavo Miravet.
Parciales: 16-16, 15-22 (31-36), 22-21, 26-16.
Árbitros: Juan Fernández y Leonardo Zalazar.
Estadio: Once Unidos (Mar del Plata).
Fuente: La Capital
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