La selección lituana dejó sensaciones opuestas en su victoria frente Angola, transmitiendo capacidad para romper el encuentro en cualquier momento por calidad individual pero faltos de trabajo como conjunto y demostrando muchas carencias en la circulación de balón. La victoria final por 75-62 dejó buen sabor de boca a la afición pero sin transmitir lo que debería.
El poderío interior lituano marca diferencias, pero Angola resiste
Lituania salió muy fuerte y logrando puntos con facilidad de la mano de Valanciunas y Matiejunas, pero entonces Angola comenzó a realizar una fuerte presión a los bases lituanos y los interiores no recibían con tanta facilidad. Angola de la mano de Cipriano y esa buena presión defensiva logró colocarse a uno (18-17) a 2’15’’ para el final del cuarto y provoca el tiempo muerto de Kazlauskas que veía como sus pupilos no lograban la fluidez ofensiva del comienzo de partido. Un triple se Juskevicius y una canasta en la pintura de Kuzminskas volvían a dar ventaja a Lituania, pero Mingas y Moore respondían en el aro rival para situar el marcador en el 23-22 con el que se llegaría al final del primer periodo.
Angola por delante, Lituania reacciona
Lituania continuaba teniendo serios problemas para anotar, como en los compases finales del primer cuarto, y una canasta y adicional de Moore y una penetración de Barros daban la primera ventaja para Angola en el encuentro (23-27) tras los dos primeros minutos de cuarto. Hasta cuatro minutos necesitó Lituania para estrenar su marcador en el segundo cuarto, con una canasta de Motiejunas, pero la renta angoleña se mantenía en cuatro puntos (27-31) en el ecuador del periodo. Tras un tiempo muerto solicitado por Angola, los lituanos reaccionaron y en apenas minuto y medio se colocaba por delante (33-31). De nuevo las faltas sobre los interiores permitieron sumar a Lituania desde el tiro libre y situarse cinco arriba con un parcial de 9-0. La imprecisiones en la circulación de balón fueron clave para que Angola volviera a acercase (36-35) con contrataques. Una canasta de Valanciunas cerraba el primer periodo con el marcador de 38-35.
Darjus Lavrinovic hace despegar a Lituania
Lituania trataba de romper el encuentro a base de triples, pero Angola respondía de la misma forma y transcurridos cuatro minutos de juego la diferencia seguía en tres puntos (46-43). La selección dirigida por Kazlauskas no encontraba a sus interiores y no lograba ver aro, únicamente a base de tiros libres lograba sumar; Motiejunas situaba el marcador en 50-45 a 3’30’’ para el final del cuarto con un lanzamiento desde la línea de 4.60, a lo que se sumó Seibutis desde la misma posición para dejar la ventaja en siete. Un triple de Darjus Lavrinovic aumentaba la renta hasta la decena de puntos (59-49) con un minuto por disputar del tercer periodo. La aportación de Darjus clave en el tramo final del tercer cuarto, que se cerraba con seis puntos consecutivos obra suya y 63-49 en el marcador.
Lituania no sentencia y Angola lucha hasta el final
Reggie Moore no estaba dispuesto a permitir que su equipo tirara la toalla, y con cinco puntos en el primer minuto y medio de cuarto dejaba a Angola por debajo de los diez puntos de diferencia (63-54). Lituania recuperaba los catorce de ventaja de la mano de Valanciunas con seis minutos por jugar, pero a pesar de tener varias oportunidades no lograban marcar una nueva máxima. Joaquim anotaba tras muchos minutos para Angola, pero Kazlauskas no quería verse sorprendido y solicitó tiempo muerto a falta de tres minutos para el final. Dos triples de Angola, obra de Cipriano y Costa obligaron de nuevo al seleccionador lituano a parar el partido con 72-62 en el marcador y 1’08’’ por jugar. A 17’’ por jugar Jankunas anotaba desde el tiro libre y situaba el 75-62 definitivo.
BOXSCORE
Fuente: Zona Dos Tres
Foto Gentileza: FIBA
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