Regatas Corrientes estaba bajo presión. Gimnasia había igualado la serie en Comodoro y le tiró todo el compromiso al equipo del parque Mitre que, tras ser Nº1 de la etapa regular, necesitaba dar un plus para alcanzar por segundo año consecutivo las semifinales de la Liga Nacional de Básquetbol. Con ese cuadro de situación complejo, Regatas respondió satisfactoriamente, se impuso 81-77 en el quinto y último partido de los cuartos de final y ahora se las verá con Boca Juniors por un lugar en la final.
“Vení, vení, cantá conmigo, que un amigo vas a encontrar... Que de la mano, del paraguayo, todos la vuelta vamos a dar...”. El cántico de la hinchada volvió a tomar vigencia anoche, porque Javier Martínez fue una de las piezas fundamentales (la televisión eligió a Paolo Quinteros como “MVP”) para que Regatas siga en carrera por el título de campeón, objetivo que desvela a todos en el parque Mitre.
La actitud de Regatas desde el inicio en la defensa fue alentadora. Porque le negó los caminos fáciles al aro a Gimnasia y si bien el partido se hizo deslucido por lo errático al principio, al equipo del parque Mitre le ayudó el hecho de jugar a un score bajo. Con un Quinteros tozudo a la hora de buscar el aro, más el buen ingreso de Meyinsse (6 cada uno) en lugar de Calderón (sorprendió el DT Casalánguida con su inclusión de titular), el local escapó 18-8. Gimnasia solo pudo lastimar a través del tándem Jackson-Robinson, aunque escaso para el primer cuarto, que terminó 18-10.
En el segundo parecía que Regatas estiraba el dominio porque con un doble de Quinteros, tras dos rebotes ofensivos de Meyinsse, recuperaba la distancia de diez (20-10). Sin embargo, Gimnasia enarboló una racha de 11-0 mediante su mejoría defensiva y pasó al frente 21-20 con sendos triples de Jackson y Scala. El juego se hizo reñido y aún cuando el vértigo fue improductivo por momentos, Regatas volvió a controlar a su rival desde la marca y obtuvo una pequeña luz de ventaja (29-25). El marcador, de todos modos, indicaba que Regatas jugaba a lo que quería jugar, con un tanteador bajo que incomodaba a Gimnasia.
El tercer cuarto fue vital. Nuevamente de dominio cambiante, Regatas escapó a 12 (46-34) porque tuvo a un Martínez inspirado en la conducción y contagió carácter. En ese sentido, vale destacar el riesgo que tomó Casalánguida al mantenerlo en cancha pese a las tres faltas del paraguayo. Y el capitán respondió de la mejor manera, encontrando complementos en Quinteros, Romano (hizo allí sus 5 puntos en la noche) y Kammerichs (seis) para sostener una diferencia de 9: 55-46.
Gimnasia quedó comprometido pero nunca tiró la toalla. Volcan Sánchez intentó estirar un poco el acotado plantel con el ingreso de Gabini pero el ala pivote estuvo más preocupado por hacer faltas (algunas con innecesaria rudeza) que por ayudar a su equipo. El que sí dio la cara por los comodorenses fue Jackson, quien junto a Robinson mantuvieron viva la ilusión de dar el golpe. Esto no llegó porque Regatas se apoyó en la puntería de Quinteros, la injerencia de Meyinsse en el segmento final y un triple clave de Martínez -el más ovacionado por el público- a poco menos de dos minutos (parcial de 72-63) que sentenció la historia y ahora que se venga Boca Juniors.
Síntesis
Regatas Corrientes (81): Javier Martínez 15, Paolo Quinteros 22, Dartona Washam 7, Federico Kammerichs 10, y Pedro Calderón 4 (FI); Jerome Meyinsse 18, Nicolás Ferreyra 0, Miguel Gerlero 0, Nicolás Romano 5, y Nicolás Brussino 0. DT: Nicolás Casalánguida.
Gimnasia (77): Santiago Scala 7, David Jackson 29, Jason Robinson 20, Diego Romero 3, y Kahiem Seawright 4 (FI); Pablo Orlietti 7, Mariano Byró 5, Exequiel Cassinelli 2, y Roberto Gabini 0. DT: Miguel Volcán Sánchez.
Progresión: 18/10, 29/25, 55/46 y 81/77.
Árbitros: Daniel Rodrigo, Diego Rougier, y Fabricio Vito.
Estadio: José Jorge Contter - Regatas Corrientes
Fuente: Diario Época
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