A pesar de que últimamente los números y la posición que ocupa en la Liga Nacional ayudan para disimular el déficit basquetbolísticos que sigue padeciendo Atenas, la realidad indica que en barrio General Bustos invade la preocupación por el presente y lo que vendrá. Felipe Lábaque ya plantó posición y afirmó su siempre expectante posición a dar un golpes de timón cuando las cosas no andan (el miércoles es el día indicado). Y Matías Lescano, uno de los principales referente del Verde, le da la derecha.
“El Bicho” se puso del lado del vicepresidente Griego y apuesta por el equipo. No anduvo con vueltas y dijo todo lo que piensa. Le duele la realidad por la que transitan y no entiende cómo de un día para el otro pueden haber padecido un importante retroceso hasta llegar a mostrar una imagen triste y apática.
El balón ya se detuvo. No está en el aire. Pero los dejos de bronca de una y otra parte hacen mella en la tranquilidad del equipo. Atenas, como sucediera en el inicio de temporada, volvió a ingresar en turbulencia. Y si bien para mediados de semana se esperan novedades importantes, desde ya todos se pronuncian y le buscan la vuelta a lo que está sucediendo. Duele y golpeo bien hondo éste momento, al menos así lo entiende Matías Lescano, que no oculta sus sentimientos y sí sale a dar la cara.
“Dejamos una imagen triste. No contagiamos nada. Es muy raro como después de cinco partidos ganados metimos cuatro derrotas seguidas, y las últimas tres muy dolorosas, perdiendo por 21, 16 y 34 (ante Olímpico, Lanús y Gimnasia de Comodoro, respectivamente). Es de no creer, porque si bien podés perder, no puede ser de semejante manera”, le dijo “El Bicho” a PODIO mientras disfruta de unos cuántos días de vacaciones junto a su familia.
¿Cómo puede ser que de un día para el otro se caiga tan bajo?
No lo sé. Es complicado. Veníamos a hacer el mejor básquetbol de la temporada contra Peñarol en nuestra casa y de repente nos chocamos con esto. Es como que el equipo se relajó. Nos desordenamos, no defendimos como sabemos hacerlo, nos olvidamos de pasar el balón en ataque... Todo mal. Definitivamente es un retroceso muy grande.
Nunca es bueno perder, pero... ¿Se lo hizo en el momento justo o preferían rápidas revanchas?
Sin dudas se perdió en el momento justo. Después de caer en Córdoba con Olímpico queríamos ya una revancha, necesitábamos cambiar la cara y mejorar, y nada de eso sucedió, al contrario. Las siguientes derrotas fueron peores. Personalmente me viene bárbaro por la calentura que tengo. Hay que enfriar la cabeza y que cada uno piense cómo darle desde su lugar una solución al equipo.
¿Es más fácil hacerlo individual que colectivamente?
Lo que pasa es que cuando estamos juntos siempre buscás tirar para delante, y eso ahora no se ha dado. Si nos hubieras visto entrenar en Comodoro esa mañana, parecía que a la noche nos lo comíamos crudo a Gimnasia, y mirá lo que pasó. Quizás estemos saturados colectivamente.
¿Se sienten los dichos de Felipe Lábaque?
Ni molesta, ni duele. Tiene mucha razón en lo que dice. Yo pienso cosas muy parecidas a las que dijo. Dimos una muy mala imagen, nos mostramos como un equipo apático. Creo que a las cosas hay que tomarlas como se debe, con conciencia. Él y todos nosotros sabemos que el equipo puede dar más, por eso esta bueno recibir estos tirones de oreja. Las críticas siempre ayudan.
¿Personalmente qué esperás para el reinicio?
Volver a mostrar esa imagen de equipo ganador que teníamos hasta éstos últimos partidos, que fue muy triste. Y lamentablemente esa es la imagen que nos queda a todos. Sin haber llegado a nuestro techo llegamos a estar terceros o cuartos, y eso nos ayuda a ilusionarnos.
Duente: La Mañana
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