El técnico de Sionista admitió que fuera de casa su equipo muestra dos caras diferentes y que esa irregularidad perjudica. Dijo que es “inaceptable” la cantidad de puntos que recibieron en el primer tiempo. “Tenemos que renovar ambiciones y hacernos responsables de las situaciones”, agregó.
El yeso en su brazo derecho no le permitía maniobrar las dos enormes valijas que llevaba rumbo al micro que lo iba a depositar en Paraná. Sebastián Svetliza salió apresurado del hotel donde concentró Sionista en Junín. En sí, tanto el DT como los jugadores no veían la hora de regresar tras otro fin de semana negativo.
Faltan pocos minutos para las 2 de la mañana del lunes feriado y el DT deja traslucir en su rostro gestos de cansancio y agotamiento. Ya pasó la cena del plantel post derrota con Argentino por una nueva fecha de la Liga Nacional A.
En el ambiente se mastica bronca. Sionista dejó en el camino una extraña sensación. Jugó muy mal el primer tiempo y reaccionó en el segundo. Estuvo cerca de la hazaña, aunque otra vez quedó en deuda. Svetliza saluda, detiene su marcha y acepta el diálogo con EL DIARIO.
-Se hace difícil entender como Sionista mostró dos caras en un mismo partido: muy flojo en el primer tiempo y sumamente agresivo en el complemento. De ser dominado pasó a dominar, fue de un extremo al otro.
-Cuando jugamos de visitante somos de mostrar una doble cara. El viernes en Río Tercero fue todo al revés de lo sucedido en Junín. Fuimos inteligentes durante 30 minutos y en los últimos 10 tiramos todo por la borda. Contra Argentino pasó en forma inversa. Entramos desconcentrados, apurados y distraídos. Nos metieron una cantidad de puntos inaceptables. Después, hicimos un gran esfuerzo por corregir, aunque se hace muy difícil dar vuelta un partido como éste. A mi me hubiese gustado que ese esfuerzo haya sido más regular. La idea siempre es empezar el partido y hasta el final pelearla con la misma intensidad. Últimamente de visitante no lo estamos haciendo.
-¿Te sorprendió lo mal que jugó el equipo en la primera mitad? Le convirtieron 57 puntos.
-Si, me sorprendió. No esperaba para nada que arranquemos de esa forma. Me sorprendió porque estamos entrenando muy bien, muy duro. Habíamos mejorado el rendimiento colectivo en los partidos de local. Estábamos bien. De visitante tenemos que encontrar solidez y ambición. No tomamos los partidos como debemos tomarlos.
-¿Y por qué? ¿Por qué le cuesta tanto?
-Veo que el equipo juega con la necesidad y a su vez con la falta de necesidad. Y eso es un arma de doble filo. Cuando el equipo se vio obligado por las circunstancias respondió bien. Pero cuando la presión se diluyó no respondió de la misma manera. En esta situación siempre caminamos por la cornisa. Afuera no somos lo suficientemente ambiciosos, no nos damos cuenta que estos son los partidos que nos dan un salto de calidad.
-En el complemento el equipo asimiló rápido lo mal que estaba jugando y reaccionó fuerte. ¿Qué te generó este cambio de actitud?
-La reacción me dio mucha más bronca porque sé que el equipo tiene personalidad, no hace falta que me lo demuestre. Lo que estamos buscando es que esa personalidad esté desde la primera bola de la noche. Nosotros podemos perder con cualquier equipo, pero no podemos permitirnos entrar relajados.
-El miércoles por TV se encuentran con Lanús, un gran equipo que está bien arriba. ¿Qué te dice este juego?
-Que será un partido de carácter. Lanús, Regatas y Peñarol son los equipos que ya encontraron su identidad y se hacen sentir. No significa que no le podemos ganar, al contrario. Igual, para hacerlo debemos estar sumamente concentrados y ser muy inteligentes. La “ventaja” es que a este partido llegamos con necesidades. Tenemos que ganar para discutir por los ocho primeros lugares. Hasta ahora hemos respondido bien, pero igual, no quiero seguir caminando por la cornisa. Tenemos que renovar ambiciones y hacernos responsables de las situaciones.
Fuente: El Diario
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