Le sacó el cepo al Verde


No hay que darse por vencido, ni aún vencido, dice un conocido refrán. Y eso es lo que anoche hizo Atenas. Todo parecía estar perdido, pero a puro corazón se quedó con un triunfo que cotiza en Bolsa. Fue 83-82 para que todo terminara en medio de un estruendoso festejo. Festejo sumamente necesario para seguir sacando piedras del camino.

Sonó la campana, se vieron las caras y lo arrebató. Pum y lo dejó grogui. Sionista no perdonó al dormido Atenas y en 1’30 le metió un parcial de 8-0. Entre Jos Pittman (9 puntos -2 triples-) y Luis Cequeira (8) hicieron las cosas muy fáciles para sacar en tres oportunidades la máxima parcial de 10 unidades. Sólo arrestos individuales y el amor de Matías Lescano (8) permitió que la cosa fuera mucho más decorosa (20-27).

Con cuatro bajos, los cordobeses ensayaron una reacción con un parcial de 8-0 para arrimar 26-27. Pero nuevamente Pittman se adueñó del balón e hizo estragos. Bruno Lábaque, en ofensiva, intentó acomodar cada pieza en su lugar como si se tratara de un puñado de desconocidos jugando en el playón. Y luego se sentó descontento con Lotterio. Mientras, en ese gran desconcierto, Alexis Elsener se despachó con dos bombas (8 unidades en el cuarto) y le dio la chance al griego de quedar en juego, 38-42.

En el inicio del tercer cuarto, con Lábaque de dos y más suelto en ofensiva, se empezó a ver la luz. El capitán Verde ( 8 y dos triples) tomó las riendas del ataque y no defraudó. El dueño de casa igualó en 45 y la desesperación por verse al frente casi le juega una mala pasada. Pero con mucho corazón, defensa y un triplazo de Bruno Colli, se puso por primera vez al frente (54-53) restando 2’03 y terminó ganando el parcial 58-57.

Y en el último cuarto, a pesar del esfuerzo, pareció que entre los cinco que estaban en cancha se desconocían o que, como en un entrenamiento, estaban estrenando jugadas. Era a lo que salía, y en eso, Colli fue fundamental con su velocidad y caradurés para encarar el cesto. Pero Sionista no lo dejó ni pestañar. Igual, a puro corazón y a pesar de una diferencia que parecía indescontable (79-74) fue para adelante y tuvo la bola bajo un estruendoso aliento. Era la agonía del juego y parecía que estaba todo perdido, pero un pitazo devolvió la esperanza. Elsener tuvo en sus manos la victoria y desde la línea clavó las dos puñaladas necesarias para el 83-82. En síntesis, fue para el infarto pero todo terminó entre saltos, abrazos y mucha felicidad.

Síntesis:

Atenas (83): Lábaque 12, Bulfoni 7, Lescano 21 (x), Fierro 4 y González 5 (formación inicial); Colli 17, Aprea 2, Guaita 0, Elsener 13 y Ligorria 2. DT: Alejandro Lotterio.

Sionista (82): Cequeira 19, Goldemberg 0, Pittman 19, Sandes 14 y Lloreda 8 (formación inicial); Spalla 10, Hure 2 y Agasse 10. DT: Sebastián Svetliza.

Progresión: 20-27; 38-42; 58-57 y 83-82.
Arbitros: Daniel Rodrigo y Leonardo Mendoza.
Cancha: Carlos Cerutti.

Fuente: La Mañana
Foto Gentileza: ligateunafoto.com

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