Scola "Para llevarse una medalla hay que ganarles a todos"


En Londres, este miércoles, en instancia decisiva de cuartos de final a partir de las 16, la Generación Dorada irá contra los de Magnano.

“Nunca elijo rivales” tiró Scola, en alusión a España, que perdió ante Brasil para no jugar en semifinales con Estados Unidos y eso derivó en el cruce sudamericano de este miércoles por cuartos de final en el básquet olímpico.

Es que Brasil, dirigido por Rubén Magnano, venció este lunes por 88 a 82 a su par de España y clasificó segundo en la Zona B. El conjunto brasileño, que accedió a una cita olímpica después de su anterior participación en Atlanta 1996 se cruzará entonces con el tercero del grupo A: Argentina.

El quinteto sudamericano remontó una desventaja de 9 tantos y le marcó 31 en un cuarto a un elenco de la jerarquía del de España. Muy poco habitual, por cierto.

Por su lado, los ibéricos, campeones europeos en Lituania en el 2011, y medalla de plata en los JJ. OO. de Beijing 2008, se quedaron con el tercer puesto y tendrán como adversario a Francia, segundo del Grupo A.

En caso de ganar en cuartos de final, los españoles se evitarán en semifinales a
EE.UU. (rival más que probable del ganador de Argentina-Brasil) y se cruzarían por un lugar en la final contra el vencedor de Rusia-Lituania.

Luifa la tiene clara y anda sin vueltas: “hay que ganarles a todos. Yo nunca elijo rivales. El que nos toca, nos toca. Para llevarse una medalla hay que ganarles a todos” reiteró uno de los mejores basquetbolistas argentinos de todos los tiempos.

El ahora jugador de Phoenix Suns en la NBA habló de Brasil, rival en cuartos de final también en el mundial de Turquía 2010, donde el ala pivote albiceleste descolló:

“Será casualidad o no. Pero parece que somos dos trenes que se juntan por el mismo camino”, apuntó al respecto del historial entre ambos equipos.

¿Y Lamas, qué dijo?. “Con Brasil es un partido 50-50. Nos conocemos mucho, pero eso no es determinante. Lo determinante va a ser jugar mejor y cometer menos errores que ellos. El que lo haga seguramente avanzará a las semifinales, que es el objetivo que se plantearon los dos equipos. Tanto ellos como nosotros vinimos a pelear por una medalla”.

Por su lado, Leo Gutiérrez es otro que vivió varios Argentina-Brasil determinantes y opinó en sintonía con su DT: “nos conocemos demasiado. Esperemos jugar bien porque como todo clásico nadie quiere perderlo. Es un rival de mucho cuidado, un adversario especial, porque se trata de un clásico del continente”. Gutiérrez, figura de Peñarol de Mar del Plata, reiteró: “Los dos equipos siempre tenemos ganas de ganarnos.

Tenemos mucho orgullo ambos” remarcó. “Jugué varios, diría que todos los últimos y en líneas generales me fue bien. Ojalá que siga de racha” cerró entre risas el histórico de la selección.

Del otro bando, Magnano, que ayudó a transformar a esta camada en un equipo muy ganador, se sinceró: “Lo que más me preocupa de Argentina es que todavía tiene hambre. Aún veo en ellos esas ganas de seguir logrando cosas importantes”.

Así las cosas, con la segura vuelta de Prigioni en la base titular, Argentina se juega su última gran batalla de una Generación Dorada y Bronceada que quiere colgarse otra medalla, sea cual fuere su color y posición en el podio.

Miércoles 8 de agosto - Cuartos de final

10:00 de Argentina): Rusia - Lituania
12:15 de Argentina): Francia - España
16:00 de Argentina): Brasil - Argentina
18:15 de Argentina): Estados Unidos - Australia

Fuente: El Atlántico

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