Empujado por el fervor de sus ganas, anda peleándole a ese desgarro que lo sorprendió. La verdad es que esa lesión provocó cierta incredulidad en algunos hinchas de Atenas, pero la tentación de meter otro desafío en el bolso de los logros lo mueve. Y ahí está Román González, moviendo sus 210 centímetros y disponiendo su cuerpo para afrontar lo que él mismo denomina como su último gran desafío.
El pasado 10 de agosto, Román sufrió un desgarro del músculo soleo de su pantorrilla derecha, en un entrenamiento del Griego. El dictamen médico clavó 45 días de recuperación. Pero, obstinado, el gigante decidió ganarle al tiempo y, parece, le está yendo bastante bien.
“Estamos con el tratamiento a full. Todos los días hago doble jornada, con kinesiología, pesas y pileta. Ahora me voy de nuevo a Río Cuarto varios días para seguir con el tratamiento de láser”, le contó Román a Día a Día. Y agregó: “Si todo va como hasta ahora, calculamos que en 10 días ya voy a tener el alta. Viene todo muy buen. Al principio, me habían dicho que era para unos 45 días. Y llevamos dos semanas nomás y está casi cerrada la lesión. A esta altura, ya casi ni siento dolor ni molestias”.
–¿Cómo sobrellevaste el momento?
–Me molestó mucho que me pasara esto porque venía con muchas ganas. El equipo está trabajando muy bien y nos estamos preparando a conciencia para lo que viene. Pero tengo que tomar las cosas como son. Es la segunda vez en mi vida que me desgarro. Ahora estoy haciendo todo para recuperarme como corresponde. Me quiero poner muy bien físicamente para no sentir tanto la vuelta a la cancha.
–¿Cuándo se te podrá ver en cancha?
–Para el cuadrangular que viene no voy a poder jugar, pero mi idea es ya estar en el Súper 8 cordobés, en el que ya espero poder jugar varios minutos.
–En cuanto al peso, contaste cuando llegaste a Córdoba que te faltaba subir unos kilos de masa muscular ¿Cómo venís con eso?
–Con el peso estoy muy bien. Estoy trabajando con un nutricionista y ya subí unos cinco kilos. Me faltan unos dos o tres más. Ahora estoy en 130, pero me falta un poquito más para llegar al peso con el que me voy a sentir bien para jugar abajo del aro.
–¿Cómo te trata Córdoba?
–Estoy de diez. Me gusta mucho la ciudad. La gente es muy amable y la verdad es que mostró mucho cariño. Se siente las ganas del hincha de ya empezar a ver a este equipo. Sabemos que salimos con la necesidad de dejar atrás el resultado final que tuvo Atenas la pasada temporada y se armó un equipo para estar arriba. Noto muy esperanzada a la gente y eso es motivante.
–Y mira que te insultaban cuando jugabas contra Atenas...
–Vamos a ver si las puteadas son para los otros ahora. Pero si me quieren putear y el equipo gana, está todo bien. Je.
Fuente: Día a Día
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