Así se manifestaba Gabriel Piccato, flamante entrenador jefe de Obras Sanitarias, actual monarca sudamericano y sub campeón de la Liga Nacional. El ex DT de Boca y La Unión se mostró entusiasmado por lo que se viene y por el plantel que tiene.
¿Qué te significa esta experiencia en Obras?
Muy contento por tener trabajo, por seguir en la competencia y fundamentalmente en un lugar como Obras que no sólo tiene una rica historia, sino que en las últimas ligas ha liderado la competencia. Es un muy buen desafío dentro de mi carrera profesional.
¿Tenés 40 años, naciste y empezaste en la ciudad de San Jorge verdad?
Sí, en la Provincia de Santa Fe. Me inicié en el club San Jorge, hice minibásquet y, pasando por las distintas categorías, estuve hasta los 21 años. Después, como la mayoría de los entrenadores, nos damos cuenta que nuestra carrera es muy corta como jugador y empezamos a buscar alternativas para seguir cerca el básquet. A partir de los 15 años empecé a colaborar como monitor en las inferiores del club. Luego llega a la ciudad, a nivel profesional, Pablo Columba dirigiendo el primer equipo y empiezo a trabajar con él como asistente. Al tiempo me lleva a Colón, Entre Ríos, que había comprado plaza para jugar el TNA en el año 1993. Me quedó diez años en Colón, en diferentes momentos como Entrenador y en otros como Asistente. Hasta que tuvimos que buscar nuevos rumbos y llega la oportunidad de trabajar junto a Sergio Hernández en Boca Juniors.
Positivo porque además agarraste la mejor etapa de Boca, y con Sergio Hernández de la mano…
Sí, muy afortunado. Fueron cinco años muy buenos entre Asistente y Entrenador Jefe, para luego llegar a La Unión de Formosa, que fueron estos últimos cuatro años. Y ahora Obras Sanitarias, con todas las ganas de emprender un nuevo proceso.
Cuando Minervini te da la responsabilidad de quedarte con el equipo a raíz de la salida del Tola Cadillac. ¿Qué sensaciones te dieron? ¿Sentías que era una bisagra en tu carrera?
No. Soy muy cauteloso y me gusta construirlo. En ese momento Boca era un club y equipo importante. En un principio era empezar a dirigir y ver como se iban desarrollando los acontecimientos. En la medida en que me fui sintiendo seguro, y que el equipo dio respuesta, decidimos continuar el proceso que terminó de forma exitosa. Podría decir lo contrario, que apenas asumí me sentía totalmente capacitado, pero la verdad es que siempre hay momentos en que a uno les invaden las dudas. Eso es bueno porque ayuda a ser cauto y a través de eso generar un pensamiento para seguir adelante con más opciones. Eso fue lo que sucedió: un inicio con mucha observación. Vi que el nivel de conocimientos era el apropiado, que el equipo respondía, que todo el entorno estaba apoyando el proceso que empezó con esa final donde Peñarol sale campeón. Unos meses después se invierte la situación y fue una experiencia impresionante.
En Boca dirigiste a unas de las glorias de Obras Sanitarias junto con Juan Gutierrez, porque Lázaro Borrell es hombre símbolo del club…
Sí, creo que sin lugar a dudas los jugadores hacen distintos a los entrenadores. En el caso de Lázaro, como todo jugador quería más tiempo de juego. Me decía que podía dar un poco más, y en los momentos claves él pudo inclinar la balanza a favor de Boca Juniors. Entonces siempre lo voy a recordar con mucho afecto porque es una gran persona y un gran jugador que también lo ha disfrutado mucho tiempo la gente de Obras. Guardo el mejor de los recuerdos. Grandísima persona y como atleta en los momentos difíciles siempre resolviendo, y de buena manera.
Ahora llegaste a Obras, tuviste esa etapa de cuatro años que mencionabas en La Unión de Formosa. ¿Alguna vez te pasó estar con la sensación de tener todo el equipo armado y sólo faltarte los extranjeros?
Esto lo hablaba con Fabián Borro cuando empezaron las negociaciones. Le dije que si el perfil de entrenador que buscaba era de alguien que tenga que venir a organizar un club o a reestructurarlo, no era mi perfil. So y un técnico que se siente cómodo en lugares donde están organizados, donde sólo tiene que dedicarse a lo que sabe y a construir la temporada. Me parece que Obras está con un plantel estable al cual le dio continuidad de jugadores probados. Toda la logística y formación que veo alrededor del equipo es de primer nivel y no sólo lo que se ve, sino también lo que percibo a nivel humano, con gente dispuesta a que todo vaya bien. Puede parecer muy simple lo que digo pero no es tan habitual en la realidad. Son pocos los lugares adonde uno llega y nota que el entorno está dispuesto a colaborar y seguir el camino pautado. Me parece que son puntos a destacar porque además siempre nos quedamos con aquellas cosas que faltan, nunca valoramos lo que uno tiene. En este caso es mi deber decir que he llegado y esta todo en marcha. Ahora falta completar el equipo con las fichas extranjeras.
¿Qué le suma a este equipo la llegada de Fernando Calvi?
Fundamentalmente es un jugador que se identifica con el club. Eso siempre hace que exista un esfuerzo extra a la hora de jugar, un mayor compromiso. La experiencia también, porque es alguien que conoce mucho el club y la Liga para desempeñar un rol especifico como lo es la parte defensiva. Ofensivamente su entendimiento de lo que sucede en la cancha. Esos dos condimentos le van a venir muy bien a la plantilla.
Hablando justamente del equipo. ¿Cuál es tu impronta y sello de “Piccato” para con este conjunto?
Primero terminar de hacer un diagnostico profundo de las características de los jugadores, de aquellas cosas que funcionaron bien la temporada anterior que fueron muchas. Sobre eso pequeños matices respetando siempre mi filosofía como entrenador. Intentaré realizar con este equipo lo que la mayoría de los técnicos desean con los suyos. Que defendamos duro y bien, que consigamos en los primeros minutos esos puntos valiosos de ataque rápido, cada vez más difíciles en nuestra liga. Y ofensivamente tratar de potenciar todas las virtudes, que entiendo que es una plantilla rica técnicamente y tácticamente, de buena lectura de juego. Tratar de ponerme al servicio para que mi sistema no esté por encima de la individualidad, sino todo lo contrario. Intentar generar un contexto donde cada jugador pueda expresar lo que mejor tiene y hace, porque ese es el camino para hacer un buen equipo.
La temporada pasada este equipo disputó alrededor de 80 partidos en 5 torneos. Da la sensación de que esta temporada tendrá una cantidad similar de certámenes. ¿Cómo se empieza a preparar la cabeza y el físico de los jugadores para esa exigencia?
Lo más importante es el día a día. Durante la temporada, que es larga y tiene muchos compromisos, si uno se pone a sacar cuentas de cantidades de juegos desperdicia demasiada energía. Genera hasta incertidumbre. Lo más correcto es ir creciendo con el equipo y trabajarlo a diario. Si bien uno sabe los objetivos y etapas intermedias donde uno quiere llegar lo más importante es la labor paso a paso. Poner la atención y el foco en ello ya que hace que el equipo se vaya construyendo, que me parece lo más importante. Uno siempre manifiesta su deseo de estar en una instancia final, que está muy bien, pero hay muchos pasos anteriores a llegar a esa posible etapa que es ganar cada partido, entrenar lo mejor posible, prepararte y construir. De esa manera se puede afrontar la cantidad de partidos y la competencia. Fundamentalmente también así se puede uno sentir seguro, porque a partir de ahí depende uno como se va a presentar en los siguientes juegos.
Da la sensación de que Obras Sanitarias tiene la mejor pareja de bases de la Liga. Con un jugador internacional que es Martín Osimani y Alejandro Konsztadt con una proyección enorme. ¿Qué tipo de tranquilidad te genera tener esta pareja de bases?
Uno sabe que de antemano va a haber entendimiento, control de ritmo de juego, que en esta Liga se pierde muy fácilmente. Si uno analiza los juegos uno intenta lograr controlar ese compás de juego. Creo que tener dos bases muy buenos ayuda mucho a este tipo de cosas y demás cuestiones necesarias.
¿Qué utilidad es la que estás buscando respecto a los extranjeros?
Hoy toda nuestra atención está puesta en conseguir la ficha perimetral, que las características que tienen que reunir es de un jugador con buena talla y peso. Esos dos condimentos hacen que pueda defender al posible alero rival. Que pueda equiparar al alero rival defensivamente. Ofensivamente el mercado esta difícil para que con buena estatura y kilos pueda jugar de espaldas al aro. Si esta ese jugador perfecto, aunque es muy difícil. Buscar un jugador que supla esas características, mucho más versátil, jugando desde afuera, con el dribbling. Una vez que tengamos esa ficha pensaremos que características serán necesarias para el siguiente extranjero.
Metiéndonos en lo que será la próxima Liga. ¿Qué certamen avizoras que se viene viendo la conformación de todos los planteles?
Muy difícil, competitiva, y creo que muy linda para jugarla. Porque cuanto mas nivel y exigencia eso hace que el desafio sea mayor y haga que uno tenga que estar todo el tiempo al máximo de sus posibilidades. Va a ser pareja, donde todos los equipos están bien armados, donde el presupuesto y la calidad de jugadores creció, y se dan todas las condiciones para que se pueda ver un gran espectáculo.
Fuente: Prensa Obras Sanitarias
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