"Estamos trabajando en silencio desde hace más de 45 días. Quilmes va a jugar y con un proyecto a largo plazo, de tres a cinco años, según el lineamiento que dio la Comisión Directiva a la gente que conducirá el básquetbol", le aseguró ayer Barciela a LA CAPITAL.
Oscar Rígano, quien hace pocos días emprendió un viaje de descanso por un par de semanas, será el encargado del básquetbol "tricolor". "Le pedimos que él mismo elija a sus colaboradores. Si él está de acuerdo, y creemos que así es, también continuará desempeñando sus funciones Sergio Guerrero", confirmó Barciela.
"La principal tarea de hoy es cerrar los 'libre deuda' con los jugadores anteriores. Hasta tanto no hacerlo no vamos a anunciar contrataciones. Ni el entrenador, ni jugadores. Son siete las deudas de jugadores a solucionar, más las de Daniel Maffei y Luciano Martínez. Y ya firmó el suyo Axel Weigand", dijo el titular "tricolor".
Esta semana en la AdC, después de las reuniones de categoría (mañana se reunirán los clubes de A, el jueves los de TNA), se oficializará la fecha de presentación de los "libre deuda", que se fijaría para los últimos días de julio.
"Según pienso, hay que empezar de nuevo por las raíces. No puede ser que la única bandera del club que hubo en el último equipo haya sido Facundo Piñero. Quilmes tiene que tener en su equipo de Liga dos o tres jugadores de sus inferiores. Y tiene que haber un trabajo más mancomunado con la Comisión Directiva", continuó.
"La idea original es buscar un cuerpo técnico identificado con el club y tomar la base de nuestros juveniles. Como todos saben, Gregorio Eseverri tiene un año más de contrato y habrá que hablar con Facundo Piñero", amplió Barciela.
"En síntesis, buscamos identificación. Con refuerzos en los puestos que no podamos cubrir. Si me preguntás a mí, prefiero que se arme una buena base a futuro y no andar a los saltos. Ya tuvimos la mala experiencia de saltar de una categoría a otra sin base. Ese error no lo podemos repetir", sentenció el presidente.
"Hay que barajar y dar de vuelta -reafirmó-. Empezar de cero. Prefiero que me puteen por no ascender, pero lo lógico es trabajar a futuro. No es la idea del club seguir regalando prestigio, ya perdimos demasiado".
En otro orden de cosas, Barciela definió como "la pregunta del millón" dónde jugará Quilmes como local en la próxima campaña. "Por ahora, en el Polideportivo. Once Unidos tuvo unos cambios en su infraestructura y, en su momento, el Coprosede nos aseguró que no lo iba a habilitar para jugar Liga Nacional. Habría que ver si la prohibición rige también para el TNA. Pero esa es una cuestión que se resolverá en conjunto con la Subcomisión de Liga y el futuro entrenador. No es una decisión de uno solo", aclaró.
Por último, Barciela aseguró que piensan en "un entrenador marplatense". Consultado sobre si el preferido era Leandro Ramella, el presidente contestó con un "lo dijiste vos, no yo". Pero adelantó que Luis Fernández, "eterno" encargado de las inferiores quilmeñas, integraría el cuerpo técnico. "Es asistente de selección nacional, conoce como nadie a los chicos del club. Vendría muy bien que se integre", finalizó.
Por otro lado, Ramella por estas horas estaría estudiando una oferta importante para seguir su carrera como entrenador en el interior del país.
No es mucho. No es poco. Después de un largo silencio, ya hay algunos indicios sobre cómo encarará Quilmes esta nueva aventura en el TNA.
Fuente: La Capital
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