Otra vez finalista. Por cuarto año consecutivo. Peñarol, con mucho esfuerzo, doblegó a un Libertad que le dio todo para no despedirse ante su gente. Con carácter y con el respaldo del tiro de tres puntos que reapareció en el momento oportuno, el equipo marplatense se impuso 88 a 85 y liquidó por 3-1 la serie semifinal. En la definición enfrentará a Obras, con desventaja deportiva, a partir del lunes 14 de mayo.
Libertad presentó una resistencia más tenaz en relación al cotejo del último miércoles. Defendió mejor en el perímetro y contó con respuestas individuales superiores.
Peñarol, cuyo poder de gol exterior se vio limitado por la defensa sunchalense, de todos modos se las ingenió para manejar una pequeña ventaja durante todo el primer cuarto.
¿Sus argumentos? Dominio del rebote, claro triunfo de Mata en el duelo de los aleros, presencia de Leiva en la pintura y conducción picante y con gol de Facundo Campazzo, de gran arranque.
Pero las prestaciones individuales de los locales fueron otras. Graves asumió otra vez el principal rol ofensivo, pero esta vez Treise aportó con sus tiros de media y larga distancia y Alloatti entregó lo suyo en la pintura. Así los sunchalenses se las ingenieron para estar a la rueda y se fueron al descanso corto apenas un punto abajo: 20-21.
Una ráfaga estelar de Campazzo en el comienzo del segundo cuarto, con dos triples incluídos, le permitió a Peñarol establecer una máxima ventaja de nueve puntos (33-24) en poco menos de tres puntos.
Libertad, lejos de derrumbarse, reaccionó enseguida. Fernández Chávez, con un triple oportuno, evitó el pánico. Su equipo fortaleció la defensa todavía más en el perímetro, cargó el rebote de ataque con mucha determinación y contó con un Graves intratable para la defensa marplatense.
A Peñarol se le hizo cuesta arriba la última parte del primer tiempo. Cada ataque fue un suplicio. El tiro de tres puntos casi que brilló por su ausencia. Y, como si fuera poco, cayó en un momento de nervios, que costaron una falta técnica a Facundo Campazzo (por un encontronazo con Sebastián Ginóbili, sancionado de la misma manera) y otra a Martín Leiva.
Libertad, que logró equiparar la lucha por el rebote que había perdido ampliamente en el cuarto inicial, logró pasar al frente y se fue al descanso al frente 46-44.
La paridad se mantuvo en el tercer parcial, que Peñarol "bancó" sin Leiva. No obstante, robusteció su defensa notablemente y volvió a tener las de ganar. Porque logró disminuir al mínimo la incidencia de Treise, Graves y Alloatti.
Del otro lado, si bien Gutiérrez siguió fallando de tres puntos, contó con los rompimientos de Campazzo, otra vez imparable, y con un Lamonte mejorado y protagonista. Así Peñarol se fue al descanso corto al frente 64-63.
Y puso máxima presión en el arranque del último parcial con un par de escopetazos de Safar y un posteo efectivo de Gutiérrez para ponerse 71-63 arriba.
Sin embargo, como en el segundo cuarto, con mucho empuje, Libertad aprovechó un pasaje de sequía ofensiva de Peñarol y volvió a equiparar para llegar a un final tanto a tanto.
Entonces, todos los triples reparecieron juntos en el equipo marplatense. Metió uno Lamonte, otro Mata y dos Gutiérrez (que venía 0/7 en ese rubro). El último de ellos, a falta de 20", puso el marcador 85-80 y le abrió a Peñarol el pase a la final. Por cuarto año consecutivo.
Síntesis
Libertad (85): Jonatan Treise 13, Juan Fernández Chavez 7, Josh Pittman 12, Will Graves 26, Alejandro Alloatti 12 (FI) Marcos Saglietti 2, Jorge Benítez 0, Fernando Calvi 13, Sebastián Ginobili 0. Dt: Fabio Demti
Peñarol (88): Facundo Campazzo 22, Kyle Lamonte 17, Marcos Mata 17, Leonardo Gutiérrez 12, Martín Leiva 10 (FI) Pablo Barrios 0, Selem Safar 8, Matías Ibarra 0, Franco Giorgetti 0, Alejandro Reinick 2. Dt: Sergio Hernández.
Progresión: Libertad 20-21, 46-44, 63-64 y 85-88
Arbitros: Sampietro-Juan Fernández-Brítez
Gimnasio: Hogar de los Tigres (Sunchales).
Crónica: La Capital
Foto Gentileza: ligateunafoto.com
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