Al ritmo del característico chiflido de Néstor García desde el borde del rectángulo de juego manejando cada pieza como si fuera un tablero de ajedrez, Atenas se movió a un ritmo tan intenso como agotador. Mordió desde la línea de su cesto hasta meter bien la cola en la pintura, con una zona que fue mutando de protagonistas pero no de efectividad con el paso de los minutos.
La defensa colectiva fue clave y asfixiante (le generó a San Martín nada menos que 9 pérdidas de balón en el primer tiempo), y el ataque efectivo. Matías Lescano tomó el poder protagónico (11 puntos y tres triples) en ofensiva y guió al 24-20 con que el Verde se apoderó del segmento.
En el segundo, ese corazón que parecía haber dejado de latir tiempo atrás, dio muestras de que está tan vivo como activo. La banca rotó de manera incesante y cada uno respondió a la altura de las circunstancias. Bruno Lábaque fue amo y señor de los 10 minutos, generando juego individual y colectivo en ofensiva (terminó la mitad con 11 unidades y 5 asistencias) y marcando las coordinaciones en el canasto propio. Mariano García saltó como pieza clave y Miguel Gerlero se fajó con el grande que tuvo en frente, supliendo el déficit de no contar con un pivote genuino. Todo esto llevó a que el Griego consiguiera la máxima con el 42-23 (a 3’40) y el 50-31 con que se fue a los vestuarios a recobrar energías.
La “laguna” entre tanta concentración se dio en el momento inicial del tercer cuarto. Los correntinos salieron crudos a tratar de ponerse en juego y un liviano Atenas permitió un parcial de 14-6 en 1’31 para acortar las cosas 50-37. En ese lapso, los empecinamientos de Delonte Holland por engrosar sus individuales (2/7 de campo en 5’) desequilibró las acciones en contra. En contrapartida, los correntinos volcaron sus posibilidades a sus tres extranjeros (McFarlan, Mathews y Beitzel), que se combinaron con 24 puntos para lograr un parcial de 29-17 y dejar todo abierto (67-60) de cara al cierre del encuentro.
Como buscando explicaciones del por qué de lo que no salía y envueltos inevitablemente entre fantasmas, las miradas de todos buscaban un objetivo que no salía a la luz. Y si bien en esta oportunidad costó más de lo que se avizoraba en el inicio del cotejo, la fortaleza mental para salir del embrollo y marcar terreno llevó a buen puerto con el 93-75. Lo del viernes parece no haber sido un espejismo, porque Atenas volvió a demostrar signos vitales y parece estar de vuelta para dar pelea.
Síntesis:
Atenas: Bruno Lábaque 18, Matías Lescano 16, Miguel Gerlero 17, Delonte Holland 6, Marcus Melvin 15, Facundo Sucatzky 5, Samuel Clancy 4,
Mariano García 10, Juan M. Rivero 2, Franco Barroso 0. DT: Néstor García.
San Martín de Corrientes: Agustín Carabajal 8, Devon Beitzel 17, Maximiliano Maciel 9, William Mc Farlan 14, Clarence Mathews 11, Pablo Albertinazzi 3, Ariel Eslava 10, F. Ramírez Barrios 3, Fabián Elías Saad 0. DT: Leandro Ramella.
Parciales: 24-20; 50-31 (26-11); 67-60 (17-29); 93-75 (26-15).
Árbitros: Roberto Smith y Fabio Alaniz.
Cancha: Polideportivo Carlos Cerutti (Córdoba).
Crónica: La Mañana
Foto: Gentileza Mundo D
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