En un encuentro sumamente disputado, peleado y de mucho sacrificio, el elenco paranaense tuvo la conciencia suficiente para adaptarse un examen de alto voltaje y así adjudicarse un triunfo muy importante. De esta manera, el Centro Juventud vuelve a Paraná con una sonrisa, lo que le permite mantenerse en el lote de los mejores.
PISÓ FUERTE. La personalidad de Sionista para entrar con firmeza fue más que importante. El equipo paranaense hizo un correcto trabajo en ambos costados, lo que le permitió adueñarse en primer término del trámite.
En defensa el equipo visitante estuvo atento, concentrado y bien predispuesto. Matías Sandes y Hakeem Rollins se hicieron dueños de la zona pintada y marcaron presencia. Adelante, las variantes y la paciencia para buscar las mejores opciones también tuvieron su rédito. Ante una zona 2-3 implementada por el local, el Centro Juventud tuvo oficio en el perímetro para lastimar. Luis Cequeira condujo bien, Federico Ferrini fue agresivo y Johwen Villegas siempre fue una amenaza. Con ello la primera distancia fue para el conjunto paranaense, que cerró el primer cuarto arriba 19 a 6. El marcador de los primeros 10 minutos dejó bien en claro lo bien que custodió su canasta el Centro Juventud.
SE CAYÓ. El partido en el segundo cuarto cayó en un pozo. Sionista perdió equilibrio en ofensiva y le costó anotar. Se hizo más físico y en ese sentido salió algo más beneficiado el local, que sin mostrar demasiado, se hizo un poco más agresivo.
El dueño de casa empezó a trabajar mejor atrás y así correr en contragolpe. A su vez, ante las tres faltas de Rollins y el descanso que le dieron Sandes, los internos de Ciclista Olímpico empezaron a pesar debajo de las tablas. Un mayor compromiso de Deham Brown y John De Groat le permitieron al dueño de casa mostrarse más peligroso.
Sionista tuvo problemas en el traslado y ello lo llevó a ser más desprolijo en ataque, lo que trajo aparejado perder efectividad. Entonces, descompensado en el fondo y sin tanta claridad adelante, al Centro Juventud todo le costó más. Ciclista Olímpico fue todo coraje y entrega. Estuvo errático, pero la necesidad de no caer más debajo de lo que está lo llevó a pelear en todo momento. El sacrificio le permitió mantenerse cerca y ganar el parcial 21 a 13.
MÁS PROBLEMAS. Ciclista Olímpico salió decidió a dar vuelta la historia, al menos achicar y pasar al frente. Entendió en el segundo chico que la defensa fuerte y la pelea constante fue un buen recurso para desestabilizar a su rival. El local se puso ahí (39 a 37) ante un Sionista que siguió con problemas para jugar en el 5 contra 5.
Sebastián Svetliza mandó al pibe Nicolás Agasse para buscar una variante en la conducción. Mal no le fue, al menos encontró un sentido a la ofensiva: buscar a Zilli para que juegue el uno contra con Amicucci. El local consiguió su propósito, acortó y pasó al frente 43 a 42.
El panorama no solo se complicó para la visita en el tanteador, sino además por las lesiones. Juan Locatelli jugó algunos minutos y sintió dolor en su tobillo izquierdo. Afuera. A su vez, en el tercer cuarto se esguinzó Federico Ferrini. Otro afuera. El perímetro se vio resentido, encima Cequeira y Villegas no tuvieron la mejor noche, por lo que Sionista tuvo problemas para anotar.
Svetliza se la tuvo que rebuscar. Agasse y Cequeira conformaron un perímetro bajo, Hure-Sandes-Zilli un tridente de altura. Todo luchado y muy rústico. Otra vez ganó el cuarto el local 18 a 15 y así se cerró el tercer segmento para la visita 47 a 45.
A TODA ORQUESTA. La recta final fue dramática y apasionante. El nivel de juego no fue bueno, pero la discusión en el resultado hizo que el choque ganara en trascendencia y emoción. Los bandeños mostraron tener más recursos que su oponente, que en sí tuvo que experimentar una situación impensada con las lesiones de Locatelli y Ferrini.
El partido fue palo y palo. Un poquito para Sionista, otro para Ciclista Olímpico. Los santiagueños. Eduardo Villares se hizo cargo de su equipo y bajo su conducción el local tuvo más peligrosidad y más opciones. Sionista la peleó y la luchó en todo sentido.
A 4’15’’ para terminar el partido quedó igualado en 56. Noche caliente. Olímpico otra vez se puso adelante y llevó así el tanteador hasta el final. De hecho, hasta sacó una pequeña ventaja de tres puntos (65 a 62 a 42 segundos).
En Sionista apareció la personalidad de Villegas, que después de un mal partido se hizo cargo de las ofensivas. El Boricua metió 10 puntos clave, entre ellos, lo que sirvieron para empatar y también para pasar al frente 66 a 65. El local tuvo la última pero el lanzamiento de Malara no entró. Sionista volvió a festejar en La Banda.
Síntesis:
OlÍmpico (65): Machuca5, Malara 8, Brown 9, Romero 2 y Lloreda 11 (FI) Ibarra 0, Degroat 17, Villares 12 y Amicucci 2. DT: Gustavo Miravet.
Sionista (66): Cequeira 4, Villegas 13, Ferrini 10, Sandes 9 y Rollins 6 (FI) Iglesias 6, Hure 3, Zili 7, Locatelli 3, Agasse 7 y Perez 0. DT: SebastiÁn Svetliza.
Progresión: 6-19, 27-32, 45-47 y 65-66
Árbitros: Pablo Estevez y Jorge Chavez
Estadio: Vicente Rosales
Crónica: El Diario
Foto: ligateunafoto.com
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