Uno de los que brindó sus expresiones luego ante la prensa fue Nicolás Romano, quien sostuvo: “Con actitud también se puede”, en clara alusión a que el equipo del parque Mitre sacó adelante la empresa con más empeño que ideas claras.
Quizás esta merma en el rendimiento colectivo esté vinculada al momento físico de Javier Martínez, quien el viernes directamente no jugó por dolencias en la cadera y el domingo estuvo en cancha pese a no estar recuperado. Lo cierto es que la sensación que quedó flotando en el parque Mitre es que se pudo haber perdido los dos juegos, como así también ganado ambos.
Sin la fluidez ofensiva que supo mostrar durante la primera fase, Regatas evidenció muy bajos porcentajes de efectividad, especialmente desde la línea de libres (23/42 este fin de semana, el 55%).
Pero lo que faltó en ciertos rubros estadísticos, sobró en los intangibles: carácter, personalidad y mentalidad ganadora para inclinar la balanza, principalmente en el juego ante Libertad.
Romano disintió cuando le hablaron de falencias a la hora de atacar en Regatas y dijo: “Para mí tuvimos fluidez ofensiva, lo que pasa es que estamos con bajos porcentajes en los tiros. Tomamos tiros buenos, bien parados, pero la pelota no quiere entrar. Es como si en estos dos juegos, ante Quimsa y Libertad, se nos cerró el aro, y pese a ello siempre estuvimos en juego”.
No obstante, reconoció que valoró la victoria justamente aún no alcanzando la mejor versión como equipo, pero sí realzando otros atributos.
“Valoramos mucho el triunfo ante Libertad, porque más allá del juego, el equipo tuvo mucha personalidad, tuvo carácter en los momentos importantes y así sacamos adelante un partido durísimo que parecía que se nos escapaba de la mano. Pero reitero, para mí la pelota no quiere entrar, así que tenemos que seguir trabajando, como lo venimos haciendo hasta ahora, para que esta situación se revierta”, agregó el ex Quilmes.
Enseguida, el ala pivote juninense remarcó que el domingo ante Libertad el equipo del parque Mitre sorteó una prueba de carácter.
“Fue así, indudablemente, no sólo por el juego en sí, sino también por el hecho de haber perdido el viernes ante Quimsa. Sentimos mucho el perder el invicto de local, y veníamos preocupados por haber marcado sólo 65 puntos. Pero el equipo mostró mucha personalidad, nos sobrepusimos al bajón anímico del viernes, y pudimos quedarnos con un partido durísimo”, rescató el habitual “revulsivo” del equipo que promedia 11.3 puntos.
Superado el duro examen que significó este fin de semana la pareja Quimsa-Libertad, ahora en Regatas ven más allá en el horizonte y según explica el propio Romano: “Nosotros sabemos que esto recién empieza. Sabemos que queda un largo trecho por recorrer, y sabemos también que seguramente vendrán nuevos obstáculos, y nuevas pruebas, pero con el entusiasmo, con las ganas, a veces, se puede superar los malos momentos, y hoy (por el domingo) dejamos demostrado que con actitud también se puede”.
Fuente: Diario Época
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