Lo dejó match point

Weber Bahía Estudiantes ganó una nueva batalla de playoffs al derrotar a Quimsa 80-76 en otro partido con final dramático, que se resolvió con una volcada en el último segundo de Devin Davis, otra vez figura del equipo de José Luis Pisani.

Con este resultado, el equipo bahiense se puso 2-0 arriba y con una victoria más conseguirá su pasaje a cuartos de final de la Liga Nacional.

WBE arrancó el partido enchufado, con su cerebro -Juan Ignacio Sánchez- suelto para trasladar y asistir a sus compañeros. Llegó a cuatro asistencias (pudieron ser más si algunas pelotas cercanas al aro terminaban en conversión) y fue una piedra en el zapato para Carlos Romano, quien alternó marcas con Jonathan Treise y Nicolás Aguirre, pero ninguno terminó siendo solución para controlar de manera adecuada all base campeón olímpico en 2004.

Precisamente Sánchez se encargó de abastecer a sus internos en el arranque. Tan es así que Ed Nelson terminó el primer chico con siete unidades y Federico Aguerre -más abierto al perímetro- marcó dos bombas desde la tercera dimensión (ocho en total) para hacer que Bahía despegue 25-15 en el marcador. Por el lado de la visita, sólo algo de potencia de Damián Tintorelli en la pintura (siete unidades) sirvió para dejar a Quimsa con un marcador decente de cara a lo que venía.

El segundo cuarto sirvió para que la visita despierte del letargo, impulsada por un Dionisio Gómez indetenible, tanto en el juego de poste bajo como en el rompimiento de afuera hacia dentro con la pelota (sobre todo con el giro en situaciones de pick and roll con los bases), y también para aportar tapones y rebotes en el otro costado. El panameño terminó el segundo chico con 10 puntos (4-5 en dobles) y recibió el apoyo incansable de Tintorelli en tierra de gigantes. Las variantes que propuso José Luis Pisani no terminaban de dar el salto de calidad que pretendía el entrenador y algunas desconcentraciones defensivas impulsaron a Quimsa a hacer un parcial de 11-0 para pasar a ganar el encuentro 35-32. La primera mitad, de todos modos, terminó igualada en 38.

Las defensas de ambos equipos eran intensas -por momentos se jugaba al medio foul- y todo parecía indicar que volvería a darse, como es costumbre, un final cerrado en el Casanova.

El pronóstico empezó a convertirse en realidad a partir del tercer cuarto: Bahía empezó mejor con la combinación entre Espil en el perímetro y Nelson en la pintura (llevaron a su equipo a despegar 51-45), pero Quimsa reaccionó impulsado por el siempre rendidor Diego LoGrippo y por Gómez, para meter otro parcial letal (12-2) y así pasar al frente 54-53. Pisani pidió minuto para ordenar las ideas y Weber Bahía empezó a cambiar la cara desde la mano izquierda de su armador, quien se encargó de manejar los tiempos del juego y de pedirle a sus compañeros reacción para no caer en el embudo que pretendía la visita. Así, desde la cabeza de Sánchez, Weber Bahía logró terminar el tercer chico con marcador igualado en 57.

El último cuarto volvió a servir para que se prolongue el idilio entre Devin Davis y la gente. El ala-pivote estadounidense volvió a jugar otro partidazo de playoffs, aportando en ofensiva, peleando en defensa todas las pelotas y colaborando en los cristales (finalizó el juego con 16 puntos y 13 rebotes). Pero detrás de una gran planilla siempre está Pepe Sánchez: buscó una y otra vez a Davis en ofensiva para que su mano no pierda el calor y lo logró. Como si fuera poco, Pepe terminó con 14 puntos, seis en el cuarto, nueve asistencias y ocho rebotes. Parejito.

WBE logró escaparse por siete puntos (70-63) gracias a un triple clave de Pablo Gil desde 45 grados cuando el partido estaba punto a punto. Y cuando parecía que la victoria no podía correr peligro para Bahía (gracias a una gran rotación de balón y un ajuste defensivo ideal contra Quimsa), Treise empujó a la visita y una falta desafortunada de Mateo Gaynor sobre Tintorelli (foul y doble con algo más de 25 segundos por jugar, con WBE arriba 74-69), hizo que el partido quede a dos puntos de distancia (74-72).

A partir de allí, fueron 20 segundos interminables, cambiando cortes de faltas y tiros personales entre Espil (4-4 en libres en ese mini-partido) y Treise (3-4). La puntería sirvió para darle la derecha al escopetero bahiense, quien nuevamente fue figura en el cierre de un partido con final de película.

En la última posesión, con Bahía arriba 78-76, la defensa de Quimsa encimó a Espil y dejó libre a Davis, quien corrió de cancha a cancha para enterrar el balón y hacer explotar a la gente, ya que su conversión significó el doble clave para quedarse con el segundo punto de la eliminatoria.

Síntesis


Bahía Estudiantes (80): Juan Ignacio Sánchez 14, Pablo Gil 8 (X), Federico Aguerre 8, Devin Davis 16 y Ed Nelson 16 (inicial); Facundo Giorgi 0, Juan Espil 14, Lucas Faggiano 2, Mateo Gaynor 2 y Ariel Eslava 0. DT: José Luis Pisani.

Quimsa (76): Jonatan Treise 11, Julio Mázzaro 7, Diego Cavaco 5, Diego Lo Grippo 13 y Damián Tintorelli 14 (inicial); Nicolás Aguirre 4 (X), Dionisio Gómez 15 y Federico Marin 7. DT: Carlos Romano.

Progresión: 25-15 / 38 – 38 / 57-57.
Árbitros: Estevez – Martinetto.
Estadio: Dr. Osvaldo Casanova.

Crónica: Prensa Weber Bahía
Foto: Gentileza ligateunafoto.com

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