Al encuadrarlo en cierto contexto, es más fácil matizar lo que fue la estrepitosa caída de Regatas, 60-98 ante Halcones Xalapa, de México, en el cierre del Cuadrangular Semifinal Sur de la 4ª Liga de las Américas. Es que un rato antes, Quimsa, con su triunfo 73-62 sobre Universo, de Brasil, había asegurado la clasificación del equipo del parque Mitre al Final Four (4 al 6 de marzo). No obstante, en la conferencia de prensa post juego contra los aztecas, el técnico regatense Fabio Demti admitió sentir “sensaciones encontradas”.
“Son sensaciones encontradas, ya que pensábamos terminar diferente. Pero hay cosas que pasan por la cabeza de cada uno que no se pueden acomodar. Cuando terminó el partido de Quimsa (y la consecuente clasificación de Regatas) hubo alegría en el grupo, en el cuerpo técnico, y por ahí me parece que no tuvimos concentrados en el juego”, admitió el entrenador santafesino.
“Sin embargo -explicó- el rival jugó un partido extraordinario, y más allá de que intentamos revertirlo por todos los caminos, en especial en el segundo tiempo, en donde entramos con una agresividad diferente, la cantidad de triples, 17 de 34 (50%), es algo inusual realmente, aunque en algunos casos podemos decir que hubo facilidades y terminó por aplacar cualquier reacción. El rival jugó un partido extraordinario insisto y a partir del segundo cuarto nos dominaron. Nos dieron una lección de básquetbol”.
“Seguramente el partido con Halcones -analizó- hubiera sido otro si no estábamos clasificados. Indudablemente que resultado de Quimsa jugó en la cabeza de nosotros. Somos seres humanos y de allí que, pese a que preparamos el partido profesionalmente como cada juego, no entramos con la concentración que debíamos. Por eso las sensaciones encontradas De alegría de haber logrado el objetivo, que era lo que nos propusimos, pero no me gustó la manera de terminarlo. De allí que nos vamos también tristes por la manera que perdimos”.
“Pero más allá de ello, hay que reconocer que el equipo mexicano nos dio una lección de juego, se pasó muy bien la pelota, equilibró muy bien su juego, nos mató en el perímetro, con los triples que señalé”, agregó.
Por último, Demti se mostró muy contento por ser el único representante argentino en el Cuadrangular final, y reconoció que al ser sede, las cosas comenzaron a cristalizarse, al señalar que “nosotros sabíamos que cuando la dirigencia apostó a organizarlo acá teníamos muchas chances de clasificar a la final. Sabíamos que íbamos a tener más posibilidades en casa que afuera, por la gente, y de hecho lo logramos, y lo hicimos antes de jugar el último partido”.
Fuente: Diario Época
“Son sensaciones encontradas, ya que pensábamos terminar diferente. Pero hay cosas que pasan por la cabeza de cada uno que no se pueden acomodar. Cuando terminó el partido de Quimsa (y la consecuente clasificación de Regatas) hubo alegría en el grupo, en el cuerpo técnico, y por ahí me parece que no tuvimos concentrados en el juego”, admitió el entrenador santafesino.
“Sin embargo -explicó- el rival jugó un partido extraordinario, y más allá de que intentamos revertirlo por todos los caminos, en especial en el segundo tiempo, en donde entramos con una agresividad diferente, la cantidad de triples, 17 de 34 (50%), es algo inusual realmente, aunque en algunos casos podemos decir que hubo facilidades y terminó por aplacar cualquier reacción. El rival jugó un partido extraordinario insisto y a partir del segundo cuarto nos dominaron. Nos dieron una lección de básquetbol”.
“Seguramente el partido con Halcones -analizó- hubiera sido otro si no estábamos clasificados. Indudablemente que resultado de Quimsa jugó en la cabeza de nosotros. Somos seres humanos y de allí que, pese a que preparamos el partido profesionalmente como cada juego, no entramos con la concentración que debíamos. Por eso las sensaciones encontradas De alegría de haber logrado el objetivo, que era lo que nos propusimos, pero no me gustó la manera de terminarlo. De allí que nos vamos también tristes por la manera que perdimos”.
“Pero más allá de ello, hay que reconocer que el equipo mexicano nos dio una lección de juego, se pasó muy bien la pelota, equilibró muy bien su juego, nos mató en el perímetro, con los triples que señalé”, agregó.
Por último, Demti se mostró muy contento por ser el único representante argentino en el Cuadrangular final, y reconoció que al ser sede, las cosas comenzaron a cristalizarse, al señalar que “nosotros sabíamos que cuando la dirigencia apostó a organizarlo acá teníamos muchas chances de clasificar a la final. Sabíamos que íbamos a tener más posibilidades en casa que afuera, por la gente, y de hecho lo logramos, y lo hicimos antes de jugar el último partido”.
Fuente: Diario Época
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