Diego Cavaco regresó a Quilmes y comentó cómo se siente. Los chicos, el armado del plantel, el clásico y más. Tras varios años y vueltas no concretadas, finalmente Cavaco otra vez está en Mar del Plata y en Quilmes. El alero fue una de las primeras piezas confirmadas en el elenco de Bianchelli y, tras los primeros días de prácticas, dejó sus sensaciones.
- ¿Cómo fueron estas primeras semanas de entrenamiento? ¿Cómo ves el armado del equipo?
Muy bien, intensas. Con muchas ganas, sabiendo que esta es la parte más importante del año en cuanto a la puesta a punto y es el combustible para toda la temporada. Hay que tomarlo en serio. Se viene trabajando muy bien, obviamente que aún falta que lleguen varios jugadores pero mientras tanto corriendo con los más chicos, con Ariel (Eslava) e Iván (Basualdo), con Eric (Flor) y ahora con Luca que ya volvió de España.
- ¿Tiene algo de distinto trabajar con tantos chicos a la espera de que se completen los mayores?
No, porque te llevan, te arrastran a su ritmo, tenés que correr, no queda otra. Tienen muchas piernas y energía, eso te motiva, te da ganas de entrenar. Lo que tiene es que de la parte táctica se va hablando poco. Al no estar el equipo completo no podés ir largando todo y el cuerpo técnico está un poco limitado. Pero en la parte física hay que correr y, aunque no se pueda estar a la par todos los días, hacer lo mejor posible.
- En ese sentido, ellos te exigen a vos, pero ¿en qué vos a ellos? ¿Qué buscas remarcar o trabajar en el día a día?
Yo trato de mostrarle los pequeños detalles. Intento de que estén abiertos a recibir consejos, hablo con Javier (Bianchelli) o Mariano (Rodríguez) para ver si hay algo que ellos quieran transmitir y yo pueda hacerlo, tanto en las prácticas como lo humano. En todo lo que pueda ayudar bienvenido sea. Me gusta cuando hay chicos que quieren aprender y escuchar. Está muy bueno, te contagia. Porque después esos pequeños detalles se convierten en grandes cosas en la cancha.
- Está claro que será un perímetro joven con Sansimoni, Flor, Provenzano y Vildoza. ¿Qué vas descubriendo en ellos y cómo crees que pueden combinarse?
Hay vértigo, hay piernas, hay energía y hay versatilidad. Hay que lograr que eso sea útil para el equipo. Ser intensos defensivamente y en ofensiva lógicamente correr. Estamos conociéndonos. Son tiempos para conocer al compañero, ponernos a punto e ir buscando las formas.
- También vuelve a dirigir Javier Bianchelli. ¿Cómo lo ves? ¿Qué idea les va transmitiendo?
Con muchas ganas. Con las pocas ideas que pudo plantear, por lo que decía antes, muy claras. Nada que no se entienda. Al haber chicos hay muy buena energía, se puede correr mucho, hacer prácticas intensas. Y lo veo motivado, incentivando a todos al trabajo. Vuelve a dirigir en el club después de muchos años y sé lo que él siente al respecto. Hay que esperar a tener el plantel completo para que acomode las piezas.
- Y se arranca con el clásico, ¿cómo lo vivís?
Va a ser muy lindo volver a vivir el clásico desde adentro. Muchos años me tocó jugarlo y es una sensación única. No hay otro partido así en el país, con tanto fervor, folklore en la calle y en las tribunas. Por ahora no pienso mucho. Los días previos seguramente lo voy a sentir. Es una linda manera de empezar la Liga arrancar así.
Fuente: Prensa Quilmes
Foto: La Liga Contenidos
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