Un análisis liviano del marcador haría pensar en que Estados Unidos se ha dado un paseo triunfal, arrollando a sus rival como viene haciendo desde siempre. Pero lo abultado del resultado no esconde que los jugadores estadounidense parecieron humanos durante un cuarto, y eso ya es noticia. A Green se le escapaba el balón, Thompson estaba como ausente, los triples de Irving se rebelaban y la mejor baza del dream team eran la línea de tiros libres. Durante 10 minutos, Venezuela tosió al gran favorito al oro pero nunca se lo acabó de creer, pensando que estaba viviendo un sueño del que pronto tendría que despertar. Estados Unidos se lleva un aviso que le puede ser útil para lo que queda de campeonato, aunque los rivales han visto un atisbo de vulnerabilidad que nadie imaginaba.
El encuentro empezó con 7 puntos de Durant, poco sorprendentes visto su liderazgo en el debut. Sí que sorprendía Venezuela, que se puso cabezona hasta tal punto de acabar el primer cuarto con empate a 18, la puntuación más baja de los pupilos de coach K en lo que llevamos de Juegos Olímpicos. Los venezolanos se amparaban en una defensa agresiva y en su pívot Echenique, más Malote que nunca.
Krzyzewski abrió la mochila para el segundo cuarto y obligó a sus jugadores a que guardaran el traje de estrellas para que se enfundaran el mono de trabajo. Se acabó entonces la guerra individual y empezó la escapada norteamericana, liderada por la inspiración de Anthony y por los mates de DeAndre Jordan. El pívot imantó sus manos, se sentó en la torre control y se adueñó del espacio aéreo para cazar todos los balones ofensivos y defensivos. Al descanso, Estados Unidos no brillaba pero si respiraba de soslayo con alivio.
Con +22 en el marcador, el partido ya se pareció más el esperado, donde el rival de Estados Unidos siempre está dos escalones por debajo, dejándose llevar como en una pachanga callejera donde pongo importan las defensas y mucho los ataques. Cox mantuvo el ritmo anotador venezolano pero la agresividad defensivo decreció, lo que aprovecharon para lucirse jugadores como de DeRozan, Butler (17 puntos) y Paul George (20 puntos), que hizo un paréntesis en el partido para participar en su particular concurso de mates.
En un mal arranque de los estadounidense, acabaron ganando de 44 puntos y superan los 100 también en este partido, algo que ninguna selección ha conseguido. La que más se ha acercado ha sido Australia, próximo rival del dream team, y que ya ha ganado con contundencia sus dos partidos a Francia y Serbia. El próximo miércoles a medianoche tendrá la opción de medir su nivel ante Estados Unidos, hoy arrolladora como siempre pero nerviosa como nunca.
Síntesis:
Estados Unidos (113): Kyrie Irving (7), Klay Thompson, Carmelo Anthony (14), Kevin Durant (14) y DeMarcus Cousins (6) (FI); Kyle Lowry (5), Demar DeRozan (8), Jimmy Butler (17), Paul George (20), Harrison Barnes (4), Draymond Green (2) y De Andre Jordan (14). Entrenador: Mike Krzyzewski.
Venezuela (69): Cubillan (10), John Cox (19), José Vargas, Néstor Colmenares (1) y Gregory Echenique (18) (FI); Gregory Vargas (19), Guillant (4), Dwight Lewis Padrón, Anthony Pérez (5), Miguel Ruiz (2), Windi Graterol y Miguel Marriaga. Entrenador: Néstor Rafael García.
Árbitros: Eddie Viator (FRA), Damir Javor (ESL) y Scott Paul Beker (AUS).
ESTADISTICAS
Fuente: La Vanguardia
Foto: FIBA
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