Había que ver la imagen del final, con los jugadores del implacable Estados Unidos haciendo fila para saludar a Emanuel Ginóbili. Incluso el entrenador Mike Krzyzewski se detuvo para abrazarlo y decilre algunas palabras al oído.
Ese es el respeto mundial que Emanuel Ginóbili se ganó con tantos años de magia en el seleccionado argentino, que incluyó un subcameponato del mundo, medalla de oro en Atenas 2004 y de bronce en Beijing 2008. Y varios partidos inolvidables.
Fui un afortunado de vivir todo esto en la selección argentina", dijo el bahiense de 39 años, que se llevaba la pelota bajo el brazo. En la zona mixta, saludó a Fabricio Oberto, el ex basquetbolista cordobés que hoy es comentarista de ESPN.
Antes, "Manu" había llorado en el parqué. "Lo ideal era que me pasara en el vestuario, pero no se pudo por todo lo que me dijeron mis compañeros. Me siento feliz de todo lo que viví", amplió.
En su futuro inmediato está la próxima temporada de la NBA, con San Antonio Spurs. Quizá la última como jugador profesional. Se fue el gran Manu, uno de los más grandes deportistas argentinos de todos los tiempos.
Fuente: El Liberal
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