La guerra ya está declarada. Y es sin cuartel. Las durísimas declaraciones de Luis Scola dejaron la relación jugadores-dirigentes en la cornisa. Aún hay tiempo para desactivarla, pero las posiciones de las partes estaban muy duras hasta anoche. La esperada reunión entre las partes no sucedió. Sólo hubo cónclaves entre ellos: los jugadores en el hotel Intercontinental con Camau Espínola, Secretario de Deportes de la Nación. Y la nueva dirigencia, en la Confederación. Esto puede terminar con la renuncia de los jugadores al Mundial. Con la ida de Daniel Zanni. O con la Confederación intervenida. Las dos partes amenazan con consecuencias y el acuerdo, hasta anoche, lucía utópico.
Todo arrancó con los palos que pegó el capitán en Clarín. Ninguno estuvo dicho por que sí. Los jugadores ya tenían un plan en marcha: ir por todos, que no quede ni uno solo. Por eso, cuando le preguntaron al capitán si la renovación dirigencial sólo era un cambio de nombres, él dejó claro que los jugadores no bancan al nuevo presidente Zanni ni a su grupo de trabajo.
“Es culpable quien hace algo mal y también quienes por omisión permitieron que eso pasara. ¿Para qué hubo un tesorero, un vicepresidente o vocales si no controlaban que se evitara llegar a esta situación? ¿Qué estaban haciendo los que asumieron ahora?”, golpeó Luifa.
Del otro lado, enloquecieron. “Le falta la barba a Scola porque habla como el Che Guevara”, pegó un directivo, con ironía. “La nota tiene contradicciones. Dicen que no quieren meterse en política y es justamente lo que están haciendo. Han querido poner a un dirigente (Mario Ontivero, de Córdoba) que también estuvo en la otra gestión... Y ahora, por lo que sé, están pidiendo que nos vayamos todos. Es un despropósito. ¿Con qué argumentos? ¿Porque no les gusta nuestra cara? Hasta ahora le dimos solución a todo lo que pidieron y a los problemas que hemos heredado. Yo puedo entender que estén enojados con la conducción anterior, pero esta gestión lleva 16 días...”, explicó Fabián Borro, presidente de la Federación de Capital y fuerte sostén de Zanni.
La flamante dirigencia, que días atrás reconoció una deuda con los jugadores que no estaba documentada, tiene para jugar hoy una carta muy fuerte. Zanni cerró ayer con la UBA para que la facultad de Ciencias Económicas se encargue de la tan pedida auditoría, condición basal de los jugadores. “Serán absolutamente imparciales, no cobrarán y empezarán el lunes. Es mejor que una empresa... Estamos hablando de una universidad prestigiosa”, le explicó Zanni a Olé. El santiagueño trabajó hasta la medianoche.
Temprano, pagó ayer el 75% de los sueldos de los empleados en la CABB y les pidió paciencia para el resto. El otro tema clave, el de los seguros, está también está solucionado. FIBA Américas ayudó girando los 13.000 dólares necesarios para la NBA. “Ya los pagamos y en horas estarán”, contraataca Zanni.
Hoy los jugadores podrían entrenarse con normalidad.Los jugadores, con el liderazgo avasallante de Scola, se juntaron ayer como estaba previsto, con una actitud intransigente. “No habrá diálogo. Estos dirigentes son iguales a los otros. Se tienen que ir para que se limpie todo. Esta es la situación”, informó uno de los cracks de la Generación Dorada. También se reunieron con Espínola, desde las 20.30 a las 21.15. Ni un pasó atrás quieren dar. Y Camau podría decidir la intervención.
La info llegó a la CABB. “Quizá Camau se saque el neoprene y se ponga el traje de milico, de interventor”, pegó un directivo del Interior. Se escuchó que los jugadores ya tendrían un nombre para el cargo. Sería el de Federico Susbielles, ex jugador que está en el PAMI y el Enard. “No sé nada”, le dijo el Chubi a Olé.
Borro se molestó con la posibilidad. “Sería otro disparate. Se hizo una asamblea, con la Inspección General de Justicia y un escribano; se cumplió un estatuto, participaron las federaciones y hubo un ganador. Es una salida democrática. ¿Cómo salís a pedir una intervención? ¿Con qué argumento? Además, si te intervienen, FIBA puede desafiliar a la CABB”, razonó Borro, quien prometió "pelearla hasta el final si creen que me van a echar como un perro”.
Las figuras, tras juntarse con Camau, decidieron no hablar. Y Espínola tampoco quiso hacerlo. Ambas partes fueron consultadas pero prefirieron el silencio. Los mundialistas hablarán este viernes, tras el entrenamiento en la UADE. Pero anoche la info desde el hotel era que iban a pedir que se vaya Zanni o renunciarán al Mundial.
Los dirigentes, pese a todo, todavía están abiertos al diálogo. “Me gustaría juntarme cuando todo se calme”, siguió Zanni. “Sí, claro, pero no en este marco de amenazas que escuchamos”, agregó Borro. Los jugadores no piensan lo mismo.
Como en el 2001 pasó en el país, quieren que se vayan todos. Pero la dirigencia está atricherada y no piensa dar un paso atrás. Este viernes parece que todo explotará.
Fuente: Diario Ole
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