Undécimo triunfo en línea del equipo "milrayitas" en la despedida del año en casa. Derrotó 78-71 a Boca. Campazzo y Leiva "bancaron" un partido complicado desde el vamos por la lesión de Gutiérrez
Hace mucho tiempo se decía que un buen base y buen pivote llevaban a un equipo a cualquier lado. Facundo Campazzo y Martín Leiva, fecha a fecha, se empeñan en actualizar aquella vieja sentencia. Anoche entre ambos llevaron a Peñarol a imponerse a Boca por 78-71 en un partido que tuvo algunas complicaciones por la sexta fecha de la segunda fase de la Liga Nacional de Básquetbol. Undécima victoria consecutiva de Peñarol que sigue a medio punto del puntero Regatas Corrientes.
La baja del estadounidense John De Groat, quien el sábado abandonó la delegación boquense por problemas personales y no regresaría al equipo, se equiparó a los 22 segundos del partido con la lesión de Leo Gutiérrez. El capitán peñarolense sintió un "pinchazo" en el aductor izquierdo y salió inmediatamente. Los estudios médicos que le realizarán en lo inmediato establecerán si puede recuperarse para el Súper 8 de Mendoza, que para el conjunto marplatense arranca el jueves frente a Libertad de Sunchales.
El partido, después de ese accidente, empezó a pedir de Boca. Es que el equipo porteño, con poca presencia física en el canasto, castigó seguido con sus tiros de tres puntos. En los primeros seis minutos anotó cinco de los seis que tiró y así manejó leves ventajas.
Peñarol, si bien arrancó distraído atrás, pronto hizo pie en el partido. No sólo acomodó su defensa. Leiva fue buscado mucho, como sucede a menudo, y bien. Weigand, sustituto de Gutiérrez, aportó su sacrificio defensivo y su buena media distancia. Campazzo, conducción. Boccia, en cambio, estuvo bien contenido. Pero el socio inesperado fue Kejuan Johnson, con tiro abierto y decisión para atacar el aro y provocar faltas.
En cinco minutos, entre los tres finales de primer cuarto y los dos iniciales del segundo, Peñarol aplicó un parcial de 14-0 y de caer 14-17 pasó a ganar 28-17.
Sin embargo, la rotación de Boca respondió para sacar la situación adelante y regresar de un pasaje ofensivo negro. Entre Lucas Faggiano y el estadounidense Lamont Barnes se hicieron cargo del momento y los visitantes metieron un parcial de 11-2 para achicar cuando quedaba todavía medio cuarto.
Entonces el entrenador Duro hizo un cambio raro y sacó a los dos jugadores que habían protagonizado la reacción. Boca se desinfló. Y Peñarol encontró otra ráfaga goleadora de Kejuan Johnson y detuvo la escalada visitante para irse al descanso al frente 42 a 34.
El tercer cuarto también tuvo alternativas cambiantes. Peñarol, con una correcta defensa de la pintura, lo tuvo a Boca confundido un rato, pero no pudo aprovecharlo del otro lado.
Los visitantes, que respondieron también con una gran marca sobre Leiva, fueron los primeros que terminaron con la sequía. Barnes complicó como el tercer cuarto y Cequeira apareció con cinco puntos consecutivos para que los suyos pasaran al frente por 51-50 a falta de 2’20”.
Campazzo se percató de lo delicado de la situación y asumió toda la responsabilidad. Anotó dos triples con marca encima desde muy lejos, también dos tiros libres (en total, anotó doce puntos en el parcial) y Peñarol capeó el temporal.
Al cuarto final ingresó ganando 59-56. Y el golpe lo dio en la primera mitad del segundo parcial. Con una mejoría defensiva sostenida que le permitió limitar la ofensiva rival a apenas cuatro puntos en cinco minutos. Del otro lado, Leiva impuso condiciones sobre Barnes y el puertorriqueño Sosa ingresó muy fino con el aro. Dos tiros de tres puntos suyos abrieron una brecha y Peñarol ingresó a la recta final manejando una renta de diez puntos.
No tuvo grandes inconvenientes el equipo local en asegurar la victoria. Le bastó con su muy buena producción defensiva en la recta final, con lo que hizo fallar a Boca. Y, en líneas generales, con lo que Campazzo jugó en el tercer cuarto y con lo que Leiva (15 puntos y 11 rebotes) rindió a lo largo de todo el partido. Base y pivote siempre hacen un equipo.
Síntesis:
Peñarol (78): F.Campazzo 18, K.Johnson 16, A.Boccia 11, L.Gutiérrez 0 (lesionado) y M.Leiva 15 (FI); A.Weigand 9 (x), M.Ibarra 3, G.Fernández 0 e I.Sosa 6. DT: Fernando Rivero.
Boca (71): L.Cequeira 12 (x), S.Safar 10, P.Prato 6, F.Aguerre 8 y M.Delia 5 (FI); A.Diez 9, L.Faggiano 9, L.Barnes 12 y L.Gargallo 0. DT: Carlos Duro.
Estadio: Polideportivo "Islas Malvinas".
Arbitros: Alejandro Chiti-Leonardo Zalazar.
Progresión: 23-17, 42-34 y 59-56.
Fuente: La Capital
Foto Gentileza: ligateunafoto.com
Hace mucho tiempo se decía que un buen base y buen pivote llevaban a un equipo a cualquier lado. Facundo Campazzo y Martín Leiva, fecha a fecha, se empeñan en actualizar aquella vieja sentencia. Anoche entre ambos llevaron a Peñarol a imponerse a Boca por 78-71 en un partido que tuvo algunas complicaciones por la sexta fecha de la segunda fase de la Liga Nacional de Básquetbol. Undécima victoria consecutiva de Peñarol que sigue a medio punto del puntero Regatas Corrientes.
La baja del estadounidense John De Groat, quien el sábado abandonó la delegación boquense por problemas personales y no regresaría al equipo, se equiparó a los 22 segundos del partido con la lesión de Leo Gutiérrez. El capitán peñarolense sintió un "pinchazo" en el aductor izquierdo y salió inmediatamente. Los estudios médicos que le realizarán en lo inmediato establecerán si puede recuperarse para el Súper 8 de Mendoza, que para el conjunto marplatense arranca el jueves frente a Libertad de Sunchales.
El partido, después de ese accidente, empezó a pedir de Boca. Es que el equipo porteño, con poca presencia física en el canasto, castigó seguido con sus tiros de tres puntos. En los primeros seis minutos anotó cinco de los seis que tiró y así manejó leves ventajas.
Peñarol, si bien arrancó distraído atrás, pronto hizo pie en el partido. No sólo acomodó su defensa. Leiva fue buscado mucho, como sucede a menudo, y bien. Weigand, sustituto de Gutiérrez, aportó su sacrificio defensivo y su buena media distancia. Campazzo, conducción. Boccia, en cambio, estuvo bien contenido. Pero el socio inesperado fue Kejuan Johnson, con tiro abierto y decisión para atacar el aro y provocar faltas.
En cinco minutos, entre los tres finales de primer cuarto y los dos iniciales del segundo, Peñarol aplicó un parcial de 14-0 y de caer 14-17 pasó a ganar 28-17.
Sin embargo, la rotación de Boca respondió para sacar la situación adelante y regresar de un pasaje ofensivo negro. Entre Lucas Faggiano y el estadounidense Lamont Barnes se hicieron cargo del momento y los visitantes metieron un parcial de 11-2 para achicar cuando quedaba todavía medio cuarto.
Entonces el entrenador Duro hizo un cambio raro y sacó a los dos jugadores que habían protagonizado la reacción. Boca se desinfló. Y Peñarol encontró otra ráfaga goleadora de Kejuan Johnson y detuvo la escalada visitante para irse al descanso al frente 42 a 34.
El tercer cuarto también tuvo alternativas cambiantes. Peñarol, con una correcta defensa de la pintura, lo tuvo a Boca confundido un rato, pero no pudo aprovecharlo del otro lado.
Los visitantes, que respondieron también con una gran marca sobre Leiva, fueron los primeros que terminaron con la sequía. Barnes complicó como el tercer cuarto y Cequeira apareció con cinco puntos consecutivos para que los suyos pasaran al frente por 51-50 a falta de 2’20”.
Campazzo se percató de lo delicado de la situación y asumió toda la responsabilidad. Anotó dos triples con marca encima desde muy lejos, también dos tiros libres (en total, anotó doce puntos en el parcial) y Peñarol capeó el temporal.
Al cuarto final ingresó ganando 59-56. Y el golpe lo dio en la primera mitad del segundo parcial. Con una mejoría defensiva sostenida que le permitió limitar la ofensiva rival a apenas cuatro puntos en cinco minutos. Del otro lado, Leiva impuso condiciones sobre Barnes y el puertorriqueño Sosa ingresó muy fino con el aro. Dos tiros de tres puntos suyos abrieron una brecha y Peñarol ingresó a la recta final manejando una renta de diez puntos.
No tuvo grandes inconvenientes el equipo local en asegurar la victoria. Le bastó con su muy buena producción defensiva en la recta final, con lo que hizo fallar a Boca. Y, en líneas generales, con lo que Campazzo jugó en el tercer cuarto y con lo que Leiva (15 puntos y 11 rebotes) rindió a lo largo de todo el partido. Base y pivote siempre hacen un equipo.
Síntesis:
Peñarol (78): F.Campazzo 18, K.Johnson 16, A.Boccia 11, L.Gutiérrez 0 (lesionado) y M.Leiva 15 (FI); A.Weigand 9 (x), M.Ibarra 3, G.Fernández 0 e I.Sosa 6. DT: Fernando Rivero.
Boca (71): L.Cequeira 12 (x), S.Safar 10, P.Prato 6, F.Aguerre 8 y M.Delia 5 (FI); A.Diez 9, L.Faggiano 9, L.Barnes 12 y L.Gargallo 0. DT: Carlos Duro.
Estadio: Polideportivo "Islas Malvinas".
Arbitros: Alejandro Chiti-Leonardo Zalazar.
Progresión: 23-17, 42-34 y 59-56.
Fuente: La Capital
Foto Gentileza: ligateunafoto.com
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