El paranaense admitió que aceleró el proceso para su reaparición y que el volver a las canchas con anticipación no fue una buena idea. Diferentes dolencias lo devolvieron a la inactividad. “Quiero tener salud y estar bien. Quiero volver a disfrutar del básquet”, dijo.
Faltan 15 minutos para que empiece el partido entre Quimsa y Sionista. Él está sentado en la platea, mirando como sus colegas entran en calor. Vive la previa del otro lado de la raya, cuando en realidad tendría que estar arriba del parqué.
Juan Cantero hizo una mala jugada. Y la reconoce. En el tramo final de la recuperación de su lesión en la rodilla decidió volver al escenario. Lo hizo con el consenso del cuerpo técnico, médicos y dirigentes de Quimsa. La idea era jugar algunos minutos para de a poco ponerse a tono. Pero no, no era el momento para hacerlo. Algunas dolencias musculares encendieron la alarma y para evitar mayores problemas decidió parar.
En un mano a mano con EL DIARIO, Juan Cantero contó sobre su presente, cómo vive su etapa en Santiago del Estero y ese deseo inocultable de ponerse bien definitivamente.
-Fuiste noticia cuando volviste a las canchas, pero también cuando fuiste reemplazado por Lucas Picarelli. ¿Qué pasó?
-La idea siempre fue volver a las canchas a fines de octubre, principio de noviembre. Pasó que el equipo no arrancó de la mejor manera, perdimos los dos primeros juegos en casa, después se sumó otra derrota en Corrientes y la ansiedad por salir del pozo hicieron que se adelantara mi vuelta. El Penca Aguirre estaba jugando 30 a 35 minutos por partido y la idea era darle algunos minutos de descanso. Concordamos con el médico, el entrenador y los dirigentes y decidimos que vuelva a jugar. Encima, el extranjero que llegó no se adaptó como base. Todo eso motivó a que yo adelantara mi regreso.
-¿Y entonces?
-Después de estar 10 días entrenando fuerte y de jugar un par de partidos empecé a sentir distintos dolores. No en la rodilla operada, sino musculares. Aguanté como 20 días hasta que dije basta. No me servía ni a mí, ni al equipo que yo juegue de esa forma. Hablé con Fabio Demti y con los dirigentes y nos pusimos de acuerdo para frenar y terminar con la recuperación.
-Aceleraste el proceso de volver y no fue la mejor idea.
-Sí, tal cual. Entre todos coincidimos en empezar a jugar mientras terminaba de acomodarme. Pero no, el cuerpo no estaba en las mejores condiciones para regresar.
-¿En su momento estabas con bronca de haber acelerado tu regreso?
-Pasa que yo mismo sentía que no estaba bien. Entonces jugaba con miedo de sufrir otra lesión. Sentía que la pierna estaba débil. Por algo me empezaron a aparecer distintos dolores. Entonces, fui honesto conmigo mismo y con la gente de Quimsa. En cierta manera ya estoy curtido por las lesiones. Hoy si tengo que esperar uno o dos meses para volver lo voy hacer. Tengo la cabeza fuerte y sé que si vuelvo bien voy a rendir mucho mejor.
-Días atrás se habló mucho de la llegada de Lucas Picarelli por Juan Cantero, pero poco se supo de los motivos de este cambio.
-Yo entiendo al periodismo que desea tener la primicia, pero a veces se inventa cualquier cosa. Mirá, acá en Santiago del Estero escuche decir que me había roto de vuelta. Y nada que ver. Ni siquiera me consultaron. Después sí salí a explicar todo, a demostrar que estoy bien. Igual, me molestó lo que se dijo de mí.
-Más allá de este percance, ¿En qué fecha pensás volver?
-Estos días voy a estar trotando y ejercitando un poco. Después tengo pensado viajar a Rafaela donde hay un kinesiólogo amigo que se dedica a tratamientos de rodillas. La idea es ponerme bien físicamente para estar a la par del resto y ya ponerme a entrenar. Esto no se recupera de un día para el otro. Tengo que sacarme los vicios de renguear y pisar con temor. Quiero estar bien para dar una mano al equipo.
-Tuviste lesiones muy duras en este tiempo. Tenés ansiedad por volver o sólo te importa estar bien?
-Lo único que deseo es recuperarme. No pienso ni en el dinero ni en nada, sólo pienso en mí. Quiero tener salud y estar bien. Tratar de terminar bien el año y sentirme bien. Quiero volver a disfrutar del básquet.
-¿Cómo te trata Santiago?
-Muy bien. Los primeros días mucho calor, muy pesado, pero a medida que pasa el tiempo te adaptás. Hoy vos estas sufriendo el calor acá y yo no. Ya me acostumbré. Después la gente es muy amable, vive el básquet con mucha pasión. En mi caso prácticamente no jugué pero en la calle te reconocen, te alientan y te piden que si o sí hay que ganarle a Ciclista Olímpico.
Fuente: El Diario
Foto Gentileza: Somos Deporte
Comentarios