Nada como un día de descanso para bajar revoluciones, poner los pies sobre la tierra y analizar lo sucedido con la cabeza fría y la objetividad como bandera. Eso es lo que hizo ayer el plantel de Atenas luego de regresar del primer periplo fuera de casa en el inicio de la temporada 2012/13 de la Liga Nacional. Fundamentalmente el entrenador Alejandro Lotterio, quien en un alto de su día libre dialogó con PODIO.
“Si vemos lo que pasó en cuanto a resultados, es positivo. Se trajo uno de los dos juegos fuera de casa en el inicio de la Liga, y eso es rescatable. Ahora lo que sucedió en el inicio de los dos partidos, realmente es preocupante y no tiene que suceder más. Hubo muchas falencias y cosas por mejorar”, dijo Lotterio.
-¿Dónde radica tal desconcierto en la apertura de los juegos?
-Es muy difícil de determinar una causa. En el primero se lo puede atribuir a los nervios del debut, y en el segundo a algunas cuestiones defensivas. Pero acá es evidente que nosotros no fuimos claros, nos confundimos demasiado, perdimos balones y tomamos malos tiros. Y si bien el rival tuvo virtudes, nosotros colaboramos demasiado.
-¿Por qué se regalaron tantas faltas innecesarias? No es la defensa que usted pretende.
-No. Pero a veces cuando no salen las cosas, los jugadores se molestan un poco y atinan a eso. Debemos asumir lo que pasa y ser realistas con que no estamos finos con la defensa.
-En ofensiva no hay quién tome el balón y se haga cargo de él...
-Lo que pasa es que pensamos en un americano que nos diera esa solución cuando tuviéramos ese tipo de problemas, pero él (por Robert Hornsby) está bastante lejos de lo que habíamos visto. Esperemos que se adapte y nos brinde lo que pretendemos.
-Román González, con poco, fue determinante cuando se lo propuso.
-Estuvo muy bien. Jugó los minutos que podía jugar y estoy muy conforme con él. Tiene mucho compromiso y está tratando de insertarse en el equipo lo más rápido posible. Nos va a sumar mucho.
-¿Se puede sacar algo positivo más que el resultado del viernes con Quimsa?
-Que todos han jugado con el corazón, salvando errores tácticos que uno comete a esta altura. Esas cosas valen mucho.
Fuente: La Mañana
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