“Nunca hemos tenido un problema legal ni una carta documento en contra nuestra. Menos vamos a tenerlo ahora”, le dijo a este medio uno de los directivos que trabaja para resolver la situación. “Esperamos terminar con esto entre miércoles y jueves. La situación que se presentó tras la temporada pasada fue muy comprometida”, agregó.
Una vez que Quilmes llegue a un acuerdo con sus acreedores, se pondrá en marcha el armado del equipo para jugar en la segunda categoría del básquetbol argentino.
Se sabe que el entrenador será Leandro Ramella, aunque oficialmente aún nadie lo confirmó. Mientras que el escolta/alero Gregorio Eseverri es hasta el momento la única ficha mayor confirmada.
A su vez, los juveniles Luca Vildoza (viene de jugar el Mundial U17 con la Selección Argentina) y Tayavek Gallizi, tendrán su lugar en el plantel. También hay otros juveniles como Federico Aldama, Maximiliano Iturrioz, Facundo Grutzky y Pedro Zabala, que dependerán de la opinión del entrenador. Misma situación para Dragan Capitanich y Gonzalo Gorostiaga, que pertenecen a Quilmes pero ya ocupan ficha mayor.
El objetivo de Quilmes será estabilizarse en el TNA, teniendo en cuenta las dificultades económicas que le han generado sus últimas experiencias en la Liga “A”. El proyecto será a mediano plazo y esta vez no se buscará el ascenso hasta que no estén dadas las condiciones.
Fuente: El Atlántico
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