Martínez no sólo habló del juego de hoy, sino del respeto por su adversario, el cariño que tiene por la entidad paranaense y la melancolía que le genera estar en el Moisés Flesler.
-La temporada recién empieza, pero esta noche hay mucho en juego.
-Tal cual. Se trata de dos equipos que están en una situación muy similar. Ganar hoy significaría dar un paso importante en el primer objetivo de las campañas de ambos, que es clasificar al Súper 8. Regatas y Sionista quieren ser protagonistas y un triunfo como el de hoy sirve para lograrlo.
-Sos un jugador de mucha autocrítica. ¿Cómo llegan para esta noche?
-Hoy somos un equipo que estamos más firmes en el aporte individual que en lo colectivo. Estamos buscando ser más regulares y de trabajar más y mejor en conjunto, lo que nos permitiría ser un equipo más temible. Estamos creciendo día a día. Nos estamos conociendo más y acoplando mejor. Adelante tenemos muchas variantes pero atrás hemos tenido noches muy malas al momento de defender.
-¿Y qué mirada tenés respecto a Sionista?
-Nuestro entrenador ya nos dio los datos más sobresalientes de Sionista. Sabemos que es el equipo más goleador de la competencia, con mucho poder ofensivo y en el cual se destacan varios jugadores. Igualmente, también conocemos sus debilidades, como por ejemplo que defensivamente tiene serios problemas. Después hay que ver cómo responden sin Luis Cequeira, que es muy importante para este esquema. Está Ramiro Iglesias, que hace mucho que es parte de Sionista y es muy buen jugador. Igual, el aporte de Cequeira es muy importante y su ausencia los debe preocupar.
-¿Y en este marco cómo te imaginas el partido?
-La clave para los dos va estar en la defensa. Quien mejor trabaje en el fondo va a tener más chances de ganar. Desde ya que será un partido muy táctico.
-Te saco del juego. ¿Qué sensaciones encontrás cada vez que pisás Paraná?
-Las mejores. Venir acá siempre es especial para mí. Acá se portaron de maravillas conmigo. Me contrataron cuando yo estaba en pleno proceso de recuperación tras una operación en la rodilla y se aguantaron todas mis ñañas. Sionista es una gran familia. En todos lados donde fui me trataron muy bien, pero acá fue algo increíble. Fueron dos temporadas de mucho cariño y respeto. Siempre les voy a estar agradecidos. Tengo gratos recuerdos y me da melancolía estar en Paraná. Ojalá que esta noche me olvide de lo que te estoy diciendo y me pueda concentrar para rendirle a mi equipo. Será difícil porque en Sionista, como persona y deportista, me trataron de maravillas.
Fuente: El Diario de Paraná
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