Liga B - San Isidro Campeón

Fue una final con todas las letras y de las buenas, desde el clima que se vivió en un estadio que desbordaba de público hasta una definición del juego para el infarto, donde el tiempo regular concluyo empatado en 61 puntos y era para cualquiera, un partido muy parejo en todo su trámite donde no se sacaron ventajas claras y se alternaron en el comando del juego todo el tiempo llegando a un final “palo” y “palo”.

En el comienzo del partido se mostró mejor Alma Juniors, con bajo goleo pero un juego claro en ataque, ante el equipo local que estaba muy errático y con muchos nervios, lo que colocó un 11 a 6 para la visita promediando el cuarto. El ingreso de Toriano le dio otro ritmo a San Isidro que emparejo el trámite y se llevo el cuarto por 16 a 15.

En el comienzo del segundo se vio lo mejor del local, que con defensas muy agresivas hizo equivocar en demasía a su rival y se puso 22-15 gracias a conversiones de Martina y Acuña. Cuando Alma estaba ya sin alma, perdido y superado por el local, Rebecchi se puso el equipo al hombro, conectó dos triples y emparejó el partido. Y luego Imsandt con un triple enmudecería al estadio, que recuperaría su espíritu tras dos triples de Toriano, para finalizar el cuarto 31 a 30 para el visitante.

En el tercero los albos visitantes mostraron claridad en ataque, buen juego y hasta una volcada de Basualdo, mientras que por el lado de los “halcones rojos” casi todo era intentar desde tercera dimensión, y en base a triples de Jovanovich, Bruna, Toriano y Acosta, se mantuvo en juego para perder el cuarto 48 a 46.

A esta altura del partido, el DT Beltramo ya sabía de la importancia en cancha de Toriano y Jovanovich, por lo que comenzó el cuarto con ellos y el local parecía tomar buena ventaja al ponerse 54 a 50, pero nuevamente Rebecchi emparejó, y ayudado por triples de Ghirardi e Imsandt se llegó a un 60 – 60 faltando 3:12 minutos. A partir de allí, se jugaron muy buenas defensas, ninguno de los dos equipos acertaba al aro ni siquiera en los lanzamientos libres, lo que determinó el empate en 61 luego de una última bola de Jovanovich que boqueó el aro y salió.

El suplementario siguió el mismo trámite que el resto del partido, ya que el primer punto para el 63-61 fue cuando restaban 2:26, solo que sobre el final estuvo más certero San Isidro, que se puso 67 a 62 faltando 46 segundos, y quedó la desesperación de un Alma Juniors que solamente perdió la compostura en esos últimos segundos, cuando ya todo estaba definido para el local, que puso el definitivo 69 a 63 para el delirio de un público local que sufrió mucho pero así también disfrutó mucho más este campeonato, que lo lleva nuevamente al TNA y pone a la ciudad de San Francisco en un sitio de consideración y hace honor a su rica historia de grandes jugadores.

San Isidro fue el mejor equipo del año, se puso el número 1 y luego se consagró campeón, que mas se puede pedir a este club que tiene dirigentes ejemplares, un cuerpo técnico de lujo y un gran equipo que al igual que el año pasado, fue nuevamente campeón, y espera nuevos desafíos para la próxima temporada.

Síntesis

San Isidro (69): Toriano 13 , Mariani 13, Acosta 5, Martina 3 , Jovanovich 15 , Bruna 3, Rossi 9 , Acuña 8 . DT : Beltramo D.

Alma Juniors (63): Imsandt 9, Claude 2, Correnti 4, Talotti 8, Rebecchi 16, Ghirardi 4, Gonzalez 14, Basualdo 6. DT: De Secco R.

Parciales: 16–15, 30-31, 46–48, 61–61, 69–63 .
Árbitros: Hugo Atance y Gustavo Danna

Fuente: Diario Sports

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