No fue escoba. Tan superior resultó Atenas (pese al resultado final hipermentiroso), que pareció pasar una aspiradora para “barrer” su serie de semifinales frente a Quimsa, al que derrotó 89-82 en Santiago del Estero, para liquidarlo 3-0 y meterse en su tercera final consecutiva de Liga Nacional de Básquet.
El Griego, que mostró un rendimiento superlativo y una claridad absoluta, dominó de comienzo a fin. Y se llevó con absoluta justicia su pasaporte para otra final, por más que a principio de temporada no estuviera candidateado para estar tan arriba. Se lo ganó por puro laburo. Por pura intensidad.
Matías Lescano, súpertranquilo afuera de la cancha y un pulpo en el parqué, lo expuso clarito: “Por nombre, no éramos candidatos de nadie. Pero somos justos finalistas: salvo por el bajón de febrero, hicimos una gran temporada”, planteó.
Si en Córdoba debió esperar para dominar y se fue al descanso con ventajas cortas, esta vez Atenas plasmó una superioridad incuestionable en la primera mitad. Una vez que pasó arriba 14-13, el Griego manejó todo: tuvo una defensa que ya es marca registrada y una ofensiva que primero se concentró en Lewis-Williams (29 puntos entre ambos en la primera mitad) y luego se abrió para el resto.
Aun mejor fue el segundo cuarto, con Lewis haciendo honor a su apodo: fue una “Bestia” que lideró el despegue verde. Los dirigidos por “el Seba” González, que también encontraron el gol externo (Rivero, Lescano, Gerbaudo), metieron un parcial de 13-2 para irse arriba 46-32. A la frutilla la puso el repostero Gerlero, apenas cruzó la mitad de cancha sobre la bocina final: encestó un triplazo que le dio al verde ventaja de 15 (51-36). Así cerró asombrosas estadísticas y clavó una estocada psicológica.
Los 10 minutos siguientes mostraron dos caras antagónicas. Por un lado, la de la pasmosa superioridad ateniense, casi con baile incluido, hasta sacar 22 (61-39). Por el otro, la de la reacción de Quimsa, al que se le terminaba la Liga y achicó a 10 (66-56). La respuesta verde fue, como en toda la noche, contundente: triple de Gerbaudo y doble de García (¿pisó la línea?) para poner el 71-56.
Si Quimsa esperaba un milagro, Atenas le partió la ilusión en pedacitos con un doble de Lewis seguido por un 2+1 de Lescano (con adicional por falta) y liquidó absolutamente todo. Después, con la historia sentenciada, el local se arrimó y maquilló una diferencia que, en 40 minutos de juego, debió ser mucho más amplia.
Síntesis:
Quimsa: Nicolás Aguirre 4, Federico Marín 12, Diego Cavacco 9, Diego Lo Grippo 24, Dionisio Gómez 19, Jonatan Treise 5, Julio Mázzaro 2, Damián Tintorelli 4, Alexandro Fermani 0, Johnatan Melián 3. DT: Carlos Romano
Atenas: Bruno Lábaque 5, Matías Lescano 14, Miguel Gerlero 5, Gregory Lewis 29, James Williams 18, Diego Gerbaudo 7, Juan Manuel Rivero 6, Mariano García 5, Pablo Orlietti 0. DT: Sebastián González
Árbitros: D. Rodrigo, D. Rougier y F. Vito.
Cancha: Estadio Ciudad (Santiago). Hora: 21
Crónica: Mundo D
Foto: Gentileza ligateunafoto.com
El Griego, que mostró un rendimiento superlativo y una claridad absoluta, dominó de comienzo a fin. Y se llevó con absoluta justicia su pasaporte para otra final, por más que a principio de temporada no estuviera candidateado para estar tan arriba. Se lo ganó por puro laburo. Por pura intensidad.
Matías Lescano, súpertranquilo afuera de la cancha y un pulpo en el parqué, lo expuso clarito: “Por nombre, no éramos candidatos de nadie. Pero somos justos finalistas: salvo por el bajón de febrero, hicimos una gran temporada”, planteó.
Si en Córdoba debió esperar para dominar y se fue al descanso con ventajas cortas, esta vez Atenas plasmó una superioridad incuestionable en la primera mitad. Una vez que pasó arriba 14-13, el Griego manejó todo: tuvo una defensa que ya es marca registrada y una ofensiva que primero se concentró en Lewis-Williams (29 puntos entre ambos en la primera mitad) y luego se abrió para el resto.
Aun mejor fue el segundo cuarto, con Lewis haciendo honor a su apodo: fue una “Bestia” que lideró el despegue verde. Los dirigidos por “el Seba” González, que también encontraron el gol externo (Rivero, Lescano, Gerbaudo), metieron un parcial de 13-2 para irse arriba 46-32. A la frutilla la puso el repostero Gerlero, apenas cruzó la mitad de cancha sobre la bocina final: encestó un triplazo que le dio al verde ventaja de 15 (51-36). Así cerró asombrosas estadísticas y clavó una estocada psicológica.
Los 10 minutos siguientes mostraron dos caras antagónicas. Por un lado, la de la pasmosa superioridad ateniense, casi con baile incluido, hasta sacar 22 (61-39). Por el otro, la de la reacción de Quimsa, al que se le terminaba la Liga y achicó a 10 (66-56). La respuesta verde fue, como en toda la noche, contundente: triple de Gerbaudo y doble de García (¿pisó la línea?) para poner el 71-56.
Si Quimsa esperaba un milagro, Atenas le partió la ilusión en pedacitos con un doble de Lewis seguido por un 2+1 de Lescano (con adicional por falta) y liquidó absolutamente todo. Después, con la historia sentenciada, el local se arrimó y maquilló una diferencia que, en 40 minutos de juego, debió ser mucho más amplia.
Síntesis:
Quimsa: Nicolás Aguirre 4, Federico Marín 12, Diego Cavacco 9, Diego Lo Grippo 24, Dionisio Gómez 19, Jonatan Treise 5, Julio Mázzaro 2, Damián Tintorelli 4, Alexandro Fermani 0, Johnatan Melián 3. DT: Carlos Romano
Atenas: Bruno Lábaque 5, Matías Lescano 14, Miguel Gerlero 5, Gregory Lewis 29, James Williams 18, Diego Gerbaudo 7, Juan Manuel Rivero 6, Mariano García 5, Pablo Orlietti 0. DT: Sebastián González
Árbitros: D. Rodrigo, D. Rougier y F. Vito.
Cancha: Estadio Ciudad (Santiago). Hora: 21
Crónica: Mundo D
Foto: Gentileza ligateunafoto.com
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