En el horizonte inmediato de Lanús aparece un durísimo playoffs de Cuartos de Final ante Libertad de Sunchales, que iniciará el lunes venidero a las 21.30 en el estadio El Hogar de los Tigres.
Esta serie al mejor de cinco juegos medirá a dos de los mejores elencos de la actual temporada, que han finalizado la Fase Regular con récords muy similares, los santafesinos con 27-17 y los bonaerenses con 26-18.
El elenco de Silvio Santander arriba a este cruce con la autoestima en alza, dado que sorteó con contundencia la Reclasificación, al superar 3-0 a Sportivo 9 de Julio de Río Tercero. Asimismo, la resolución rápida de ese escollo le permitió al plantel disponer de varios días para preparar la serie ante Libertad.
Justamente en los entrenamientos se destaca una labor estratégica muy intensa, focalizada en apaciguar los atributos del rival, así como en encontrar variantes a la hora de proponer las ofensivas.
Lanús necesita obtener un triunfo en terrenos ajenos, cuestión que adquiere una complejidad cierta ya que los de Sunchales disponen de una localía extremadamente sólida, la mejor de la temporada con veinte victorias y sólo dos caídas. No obstante, el Granate es el tercer equipo más ganador en condición de visitante con once alegrías. Estas cuestiones estadísticas fundamentan aún más la paridad de la serie.
El técnico Silvio Santander aceptó la propuesta de analizar el cruce con Libertad y comenzó el diálogo explicando el trabajo táctico que encaran esta semana. El coach contó que “hemos jugado cinco veces con ellos en el año, revisamos los partidos del rival y empezamos a tomar lo que tiene que ver con las características y sabemos que estamos enfrentando a un equipo que es rico individualmente, que son jugadores que pueden resolver situaciones por capacidad técnica. Debemos neutralizar eso, las características de cada uno. La preparación de la serie nace desde ahí, de revisar y empezar a ponernos finos en las cualidades de cada uno”.
El equipo de Flor Meléndez cuenta con un quinteto titular de altísima capacidad goleadora, al punto que promedian 64 puntos por encuentro, situación que implica una disposición defensiva importante, puesto que Lanús deberá neutralizar las muchas variantes de ataque del oponente.
En relación a esta circunstancia, Santander opinó que “en la preparación de la serie el cuidado está en los detalles de cada regla, cada acción individual, en un alto compromiso en cuanto la comunicación defensiva para llevarlos a ellos al margen de error. Es un equipo rico individualmente pero que nosotros lo hemos puesto incomodo a la hora de atacar. Lo más importante para nosotros es ver mucho hacia adentro nuestro circuito defensivo, que nos ha funcionado todo el año”.
El ambiente del básquetbol argentino coincide en que esta llave se caracteriza por la paridad, dado que ambos elencos cuentan con suficientes recursos para continuar en la carrera al título. El entrenador de Lanús otorgó su punto de vista en cuanto a esta temática al aseverar que “cuando llegan estas etapas se pueden dar series muy parejas en pocos juegos, o a veces puede suceder que sean juegos abiertos pero series parejas que llegan a una quinta noche. No tiene que sorprender que sea una llave de no tantos juegos pero sin embargo una paridad muy importante con cierres calientes de los dos lados para resolver. Confío mucho en el equipo, porque hemos ganado partidos importantes afuera, estamos en el momento que queríamos estar, porque estamos bien entenados, los jugadores sanos, el equipo largo y con la autoestima buena. Nosotros sabemos que estamos ante un rival difícil, pero a nadie tiene que sorprender que podamos cruzar esta serie”.
Las batallas de playoffs adquieren marcos inolvidables, noches de alto voltaje, donde generalmente se imponen los más compenetrados y decididitos. El aspecto mental asume preponderancia en esta clase de encuentros, sobre ello Santander sostuvo que “una cosa que trato de aprender cada año y mas con la clase de jugadores que he tenido, que en este caso me pasa con Lucas (Victoriano) y Gaby (Fernández), es que entiendo que los técnicos estamos peleándonos entre comillas en la serie regular para dar el 110% todos los partidos, para buscar la mejor ubicación. Sin embargo en playoffs ellos solos saben que son competidores que quieren ganar y todo lo que tiene que ver con ponerse fuerte de la cabeza para ganar una serie corre mucho por cuenta de ellos. Creo que hoy los entrenadores tenemos que estar preparados para ajustes ofensivos y defensivos que se preparan para una serie puntual, hay cosas que no son iguales para 9 de Julio que para Libertad, eso es algo importante que al tener un equipo que el grueso ya trabajamos juntos casi dos años, nos permite hacer variantes respecto al rival sin llevar mucho tiempo, al repasarlo ya sabemos que lo podemos hacer”.
Fuente: Prensa Lanús
Esta serie al mejor de cinco juegos medirá a dos de los mejores elencos de la actual temporada, que han finalizado la Fase Regular con récords muy similares, los santafesinos con 27-17 y los bonaerenses con 26-18.
El elenco de Silvio Santander arriba a este cruce con la autoestima en alza, dado que sorteó con contundencia la Reclasificación, al superar 3-0 a Sportivo 9 de Julio de Río Tercero. Asimismo, la resolución rápida de ese escollo le permitió al plantel disponer de varios días para preparar la serie ante Libertad.
Justamente en los entrenamientos se destaca una labor estratégica muy intensa, focalizada en apaciguar los atributos del rival, así como en encontrar variantes a la hora de proponer las ofensivas.
Lanús necesita obtener un triunfo en terrenos ajenos, cuestión que adquiere una complejidad cierta ya que los de Sunchales disponen de una localía extremadamente sólida, la mejor de la temporada con veinte victorias y sólo dos caídas. No obstante, el Granate es el tercer equipo más ganador en condición de visitante con once alegrías. Estas cuestiones estadísticas fundamentan aún más la paridad de la serie.
El técnico Silvio Santander aceptó la propuesta de analizar el cruce con Libertad y comenzó el diálogo explicando el trabajo táctico que encaran esta semana. El coach contó que “hemos jugado cinco veces con ellos en el año, revisamos los partidos del rival y empezamos a tomar lo que tiene que ver con las características y sabemos que estamos enfrentando a un equipo que es rico individualmente, que son jugadores que pueden resolver situaciones por capacidad técnica. Debemos neutralizar eso, las características de cada uno. La preparación de la serie nace desde ahí, de revisar y empezar a ponernos finos en las cualidades de cada uno”.
El equipo de Flor Meléndez cuenta con un quinteto titular de altísima capacidad goleadora, al punto que promedian 64 puntos por encuentro, situación que implica una disposición defensiva importante, puesto que Lanús deberá neutralizar las muchas variantes de ataque del oponente.
En relación a esta circunstancia, Santander opinó que “en la preparación de la serie el cuidado está en los detalles de cada regla, cada acción individual, en un alto compromiso en cuanto la comunicación defensiva para llevarlos a ellos al margen de error. Es un equipo rico individualmente pero que nosotros lo hemos puesto incomodo a la hora de atacar. Lo más importante para nosotros es ver mucho hacia adentro nuestro circuito defensivo, que nos ha funcionado todo el año”.
El ambiente del básquetbol argentino coincide en que esta llave se caracteriza por la paridad, dado que ambos elencos cuentan con suficientes recursos para continuar en la carrera al título. El entrenador de Lanús otorgó su punto de vista en cuanto a esta temática al aseverar que “cuando llegan estas etapas se pueden dar series muy parejas en pocos juegos, o a veces puede suceder que sean juegos abiertos pero series parejas que llegan a una quinta noche. No tiene que sorprender que sea una llave de no tantos juegos pero sin embargo una paridad muy importante con cierres calientes de los dos lados para resolver. Confío mucho en el equipo, porque hemos ganado partidos importantes afuera, estamos en el momento que queríamos estar, porque estamos bien entenados, los jugadores sanos, el equipo largo y con la autoestima buena. Nosotros sabemos que estamos ante un rival difícil, pero a nadie tiene que sorprender que podamos cruzar esta serie”.
Las batallas de playoffs adquieren marcos inolvidables, noches de alto voltaje, donde generalmente se imponen los más compenetrados y decididitos. El aspecto mental asume preponderancia en esta clase de encuentros, sobre ello Santander sostuvo que “una cosa que trato de aprender cada año y mas con la clase de jugadores que he tenido, que en este caso me pasa con Lucas (Victoriano) y Gaby (Fernández), es que entiendo que los técnicos estamos peleándonos entre comillas en la serie regular para dar el 110% todos los partidos, para buscar la mejor ubicación. Sin embargo en playoffs ellos solos saben que son competidores que quieren ganar y todo lo que tiene que ver con ponerse fuerte de la cabeza para ganar una serie corre mucho por cuenta de ellos. Creo que hoy los entrenadores tenemos que estar preparados para ajustes ofensivos y defensivos que se preparan para una serie puntual, hay cosas que no son iguales para 9 de Julio que para Libertad, eso es algo importante que al tener un equipo que el grueso ya trabajamos juntos casi dos años, nos permite hacer variantes respecto al rival sin llevar mucho tiempo, al repasarlo ya sabemos que lo podemos hacer”.
Fuente: Prensa Lanús
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