Nicolás Ferreyra es uno de los principales responsables del gran momento que atraviesa Quilmes en el Torneo Nacional de Ascenso. El base, que comparte la conducción dentro de la cancha con Mac Hopson, fue el máximo exponente ofensivo del equipo marplatense a lo largo de la temporada y ahora comparte esa función anotadora con el último refuerzo del plantel.
Tras el 3 a 0 con el que el “Cervecero” barrió a Ciudad de Bragado y se metió en las semifinales, Ferreyra dialogó con El Atlántico y analizó el presente del elenco de Daniel Maffei. “En los momentos difíciles y bajo presión, el equipo responde”, señaló.
-Ni el más optimista hubiera pensado en la previa que Quilmes iba a resolver la serie tan rápido ¿no?
-Sí, creo que lo que los mató psicológicamente a ellos fue haber perdido el primer partido de local. También se encontraron con un Quilmes muy duro, que venía de una serie muy dura y logrando todo con lo justo, porque también habíamos entrado al TNA 1 con lo justo. Yo dije en un momento, antes de que se defina si entrábamos o no entre los cuatro primeros, que por ahí era bueno no tener ese parate, seguir con rodaje y tener un play - off duro como el que nos tocó a nosotros, para no estar tan ansioso y que nos pase lo que le pasó a Ciudad de Bragado, que estuvo parado y esperando a ver quién le tocaba. A la hora de tener estos partidos duros, eso se nota.
-El nivel de Quilmes es muy alto y se nota que Hopson ha potenciado mucho al equipo. La ventaja es que la mejoría llegó en la etapa decisiva de la temporada.
-Sí, creo que estamos mejorando bastante. Lo bueno es que el equipo se va afianzando con el correr de los partidos. Creo que este equipo todavía no ha dado todo lo que puede llegar a dar y le falta bastante. Es bueno sentirse así en estas instancias e ir de menor a mayor, para tratar de llegar a las semifinales con un Quilmes que juegue bien y que esté bien anímicamente y como equipo. Creo que esas son las claves en estos momentos.
-¿La llegada de Mac Hopson te sirvió para liberarte de ciertas responsabilidades a la hora de la generación de juego y de la resolución de las ofensivas?
- Sí, la verdad es que al principio hablábamos mucho con Mac para que se meta rápido en el equipo porque realmente lo necesitábamos. Él nos da un alivio a todos porque podemos tomar tiros a pie firme sin tanto desgaste, sin forzar tantas situaciones, que era lo que antes nos pasaba. Él hace que yo me sienta más cómodo y que no termine los partidos tan desgastado. Mac también se siente muy cómodo en el sistema nuestro y bienvenido sea. Estamos muy contentos con la llegada de él y lo vamos a seguir conteniendo porque falta un estirón más y hay que tenerlo bien porque es muy importante.
-¿Este momento del equipo hace que no importe demasiado qué rival les toque en la próxima instancia?
-Creo que la clave de este play - off fue pensar siempre en lo que hacemos nosotros y tratar de hacerlo bien, para que los equipos que vengan acá no nos conviertan más de 15 ó 17 puntos por cuarto. Cuando nosotros nos logramos eso, esté quien esté adelante, sabemos llevarnos ese partido. Cuando las cosas se dan con marcadores muy altos nos cuesta muchísimo como a cualquier equipo. Pero creo que mientras Quilmes esté bien y fuerte como equipo, podemos jugar contra cualquiera. Se habló mucho de esta última serie y Quilmes tuvo la guapeza y la personalidad para pasarla. Entonces, en los momentos difíciles y bajo presión, el equipo responde.
Fuente: Diario El Atlántico
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