El Milrayitas viajó a Capital Federal y volvió al triunfo al vencer al elenco del Huevo Sánchez por 72 a 59. De este modo, continúa segundo en la tabla de posiciones a un punto y medio de Obras, que venció 86-74 a Sionista
Los dos primeros cuartos de Peñarol fueron impecables. El tercero desastroso. Y en el último lo cerró, por virtudes propias y defectos del rival. Así fue la noche del “Milrayitas”. De andar irregular en La Bombonerita, sacó adelante un partido que pintaba complicado, pero que al final no lo fue.
Ganó, es cierto, pero alternó buenas y malas. En la parte defensiva estuve firme y en ofensiva, en porcentajes, flaqueó (25/65 en tiros de cancha). Igualmente le alcanzó para derrotar 72 a 59 a Boca y recuperar la victoria luego de dos derrotas al hilo.
Por eso mismo, dentro de un juego que comenzó sucio y desprolijo, Lamonte (10 puntos en el cuarto) marcó el tiempo de su equipo con un triple inicial. Pero le duró poco la ventaja inicial, porque el “Xeneize”, de la mano de Elliott (7), pasó a comandar el tanteador y marcar un parcial favorable de 7-0 (12-7).
Sin embargo, el elenco marplatense se enojó y le devolvió un segmento de 11-0 (18-12) con el norteamericano como estandarte y con sendos triples de Campazzo (5) y otro de Gutiérrez (3). Un pasaje alentador para el visitante que enderezó la nave a pura efectividad y terminó ganando el primer cuarto 22 a 15.
Y el inicio del segundo segmento continuó con la misma sintonía, con Peñarol mejor posicionado y más inteligente con la naranja. Fue así que sacó la máxima en cancha hasta ese momento y erigió un comienzo sumamente contundente, que se agudizó luego de una avivada de Campazzo al robar una pelota (35-18).
Por esos minutos, parecía una paliza a domicilio del actual campeón de la Liga en La Bombonerita. Es que todo le salía redondo y casi sin darse cuenta le había sacado 19 unidades (40-21) ante un oponente que estaba al borde del KO.
No obstante, Boca achicó diferencias (40-27) y alimentó su deseo de pelear el encuentro, si bien el “Milrayitas” se fue al descanso largo arriba 44-27, con una luz de ventaja más que importante.
Dos triples consecutivos de Titarelli en el comienzo del tercer cuarto levantaron el ambiente en el estadio y el cotejo se puso 44-33. Aunque Leo Gutiérrez no quiso ser menos y también se anotó con el tiro exterior (47-33), para acomodar a su equipo luego de un parcial en contra de 6 a 0.
De ahí en más pasaron seis minutos con sequía para Peñarol. El partido se volvió muy malo, porque el elenco de Oscar Sánchez tampoco sacó rédito de la situación y no supo acercarse más.
Recién a dos minutos del final volvió a convertir la visita por las manos de Reinick (49-37), luego de un pasaje flojísimo. Sin embargo, en un santiamén se le vino Boca y se le puso a seis (50-44), con un parcial de 17 a 6, producto de una ofensiva marplatense paupérrima.
Y más allá que el arranque del tramo final fue parejo, Boca quedó a cuatro, cuando Ingles clavó un triple soñador (55-51). No obstante, algunas desatenciones en el equipo de “Huevo” le posibilitaron al visitante volver a respirar tranquilo cuando se fue a 11 de ventaja (62-51). Pero el local volvió a la carga y quedó a siete (62-55). Así se tornó el final. Con un equipo a la caza y el otro a punto de darle el cierre, que llegó en el minuto final, cuando no había nada más que hacer.
Ganó y eso es lo que vale. Pero puede jugar mucho mejor. Después de dos caídas consecutivas, Peñarol le cerró la Boca a su rival y continúa como inmediato perseguidor de Obras Sanitarias.
Síntesis
Boca (59): Fierro 9, Titarelli 6, O’Bannon 5, Ingles 3, Brussino 3, Vega 5, Elliott 17, Martina 8 y Alston 3. DT Oscar Sanchez.
Peñarol (72): Lauria 4, Diez 8, Mata 5, Campazzo 9, Rodríguez 3, Gutiérrez 16, Leiva 0, Lamonte 19, Safar 0 y Reinick 8. DT Sergio Hernández.
Árbitros: Rodrigo-Guzmán.
Estadio: Luis Conde, La Bombonerita.
Progresión: 15-22, 27-44, 44-50 y 59-72.
Crónica: Diario El Atlántico
Foto: Gentileza ligateunafoto.com
Los dos primeros cuartos de Peñarol fueron impecables. El tercero desastroso. Y en el último lo cerró, por virtudes propias y defectos del rival. Así fue la noche del “Milrayitas”. De andar irregular en La Bombonerita, sacó adelante un partido que pintaba complicado, pero que al final no lo fue.
Ganó, es cierto, pero alternó buenas y malas. En la parte defensiva estuve firme y en ofensiva, en porcentajes, flaqueó (25/65 en tiros de cancha). Igualmente le alcanzó para derrotar 72 a 59 a Boca y recuperar la victoria luego de dos derrotas al hilo.
Por eso mismo, dentro de un juego que comenzó sucio y desprolijo, Lamonte (10 puntos en el cuarto) marcó el tiempo de su equipo con un triple inicial. Pero le duró poco la ventaja inicial, porque el “Xeneize”, de la mano de Elliott (7), pasó a comandar el tanteador y marcar un parcial favorable de 7-0 (12-7).
Sin embargo, el elenco marplatense se enojó y le devolvió un segmento de 11-0 (18-12) con el norteamericano como estandarte y con sendos triples de Campazzo (5) y otro de Gutiérrez (3). Un pasaje alentador para el visitante que enderezó la nave a pura efectividad y terminó ganando el primer cuarto 22 a 15.
Y el inicio del segundo segmento continuó con la misma sintonía, con Peñarol mejor posicionado y más inteligente con la naranja. Fue así que sacó la máxima en cancha hasta ese momento y erigió un comienzo sumamente contundente, que se agudizó luego de una avivada de Campazzo al robar una pelota (35-18).
Por esos minutos, parecía una paliza a domicilio del actual campeón de la Liga en La Bombonerita. Es que todo le salía redondo y casi sin darse cuenta le había sacado 19 unidades (40-21) ante un oponente que estaba al borde del KO.
No obstante, Boca achicó diferencias (40-27) y alimentó su deseo de pelear el encuentro, si bien el “Milrayitas” se fue al descanso largo arriba 44-27, con una luz de ventaja más que importante.
Dos triples consecutivos de Titarelli en el comienzo del tercer cuarto levantaron el ambiente en el estadio y el cotejo se puso 44-33. Aunque Leo Gutiérrez no quiso ser menos y también se anotó con el tiro exterior (47-33), para acomodar a su equipo luego de un parcial en contra de 6 a 0.
De ahí en más pasaron seis minutos con sequía para Peñarol. El partido se volvió muy malo, porque el elenco de Oscar Sánchez tampoco sacó rédito de la situación y no supo acercarse más.
Recién a dos minutos del final volvió a convertir la visita por las manos de Reinick (49-37), luego de un pasaje flojísimo. Sin embargo, en un santiamén se le vino Boca y se le puso a seis (50-44), con un parcial de 17 a 6, producto de una ofensiva marplatense paupérrima.
Y más allá que el arranque del tramo final fue parejo, Boca quedó a cuatro, cuando Ingles clavó un triple soñador (55-51). No obstante, algunas desatenciones en el equipo de “Huevo” le posibilitaron al visitante volver a respirar tranquilo cuando se fue a 11 de ventaja (62-51). Pero el local volvió a la carga y quedó a siete (62-55). Así se tornó el final. Con un equipo a la caza y el otro a punto de darle el cierre, que llegó en el minuto final, cuando no había nada más que hacer.
Ganó y eso es lo que vale. Pero puede jugar mucho mejor. Después de dos caídas consecutivas, Peñarol le cerró la Boca a su rival y continúa como inmediato perseguidor de Obras Sanitarias.
Síntesis
Boca (59): Fierro 9, Titarelli 6, O’Bannon 5, Ingles 3, Brussino 3, Vega 5, Elliott 17, Martina 8 y Alston 3. DT Oscar Sanchez.
Peñarol (72): Lauria 4, Diez 8, Mata 5, Campazzo 9, Rodríguez 3, Gutiérrez 16, Leiva 0, Lamonte 19, Safar 0 y Reinick 8. DT Sergio Hernández.
Árbitros: Rodrigo-Guzmán.
Estadio: Luis Conde, La Bombonerita.
Progresión: 15-22, 27-44, 44-50 y 59-72.
Crónica: Diario El Atlántico
Foto: Gentileza ligateunafoto.com
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